La compañía registró un beneficio neto de 2.369 millones en 2016, una cifra que la compañía no ha comparado con la de 2015 en el informe reportado a la CNMV, tras la inclusión de O2 en los resultados consolidados, La operadora ha facilitado un resultado reportado de 616 millones para el ejercicio anterior (lo que supondría cuadruplicar sus beneficios), aunque el año pasado comunicó un beneficio neto para ese ejercicio de 2.745 millones, con lo que el anunciado hoy supondría una caída del 13,7% . Sin contar con los factores no recurrentes, Teléfonica obtuvo un beneficio neto de 4.038 millones, un 4,8% superior al del ejercicio anterior. Además, la operadora incrementó sus ingresos en un 1,3%, hasta alcanzar los 52.036 millones, impulsados por las subidas del último trimestre (+2,7%) y de los ingresos por servicios (+3,7% intertrimestral). El resultado operativo antes de amortizaciones (oibda) creció un 14,3%, hasta los 15.118 millones. La operadora también redujo su endeudamiento en 998 millones, un 1,2%, hasta los 48.595 millones. Esta misma semana Telefónica se deshizo de su filial Telxius, aunque la operación no ha computado en las cuentas. 
El flujo de caja anual avanzó un 24,4%, con lo que supuso hasta 4.370 millones, fruto de la actividad internacional de la empresa. Por otro lado, Teléfónica ha confirmado el pago de un dividendo de 0,20 por acción (segundo trimestre de 2016) durante el segundo trimestre de 2017. Además, el dividendo correspondiente a 2017 (0,40 por acción) se pagará entre el cuarto trimestre y el segundo de 2018. Las previsiones para 2017 contemplan un alza en los ingresos del 1,2%, un aumento del margen oibda del 1% y un ratio CapEx/Ventas excluyendo espectro en el entorno del 16%.
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