Mediante esta estrategia, la red social pretende frenar una posible fuga de sus mejores cerebros, que pueden verse tentados a abandonar la compañía teniendo en cuenta la difícil situación que atraviesa. Twitter, reportó una pérdida neta de 90,2 millones de dólares en el último trimestre de 2015. En el conjunto del pasado año, la compañía perdió 521 millones, por lo que continúa sin alcanzar la rentabilidad esperada. Además, su número de usuarios se estancó durante el cuarto trimestre de 2015 y alcanzó los 320 millones de usuarios activos mensuales, prácticamente sin cambios con respecto al trimestre anterior.
Por otro lado, cuatro altos ejecutivos dejaron la compañía en enero, el mayor éxodo desde que está liderada por su cofundador, Jack Dorsey. Las salidas se añadieron a las preocupaciones sobre la capacidad de la empresa para hacer su producto más atractivo y generar más dinero mediante la publicidad.
Según el Wall Street Journal, Twitter ha estado ofreciendo bonos en efectivo a algunos empleados, que van desde 50.000 a 200.000 dólares como incentivo para mantenerlos en la empresa por un periodo de entre seis meses y un año. Además, Twitter habría concedido cantidades variables de acciones restringidas dependiendo de cuándo los empleados comenzaron a trabajar, con la intención de compensar el valor que perdieron desde que se unieron a la compañía, explica el diario citando a personas familiarizada con el asunto.
Las acciones de Twitter han perdido más del 60% de su valor en los últimos 12 meses. "La compensación competitiva, un fuerte liderazgo y la confianza en la dirección de la empresa son elementos clave para retener los mejores talentos", dijo una portavoz de Twitter en un correo electrónico. "Estamos invirtiendo en las tres áreas para asegurar que mantenemos estos empleados", afirmó, sin dar más detalles.
Dorsey ya confirmó en octubre que daría una tercera parte de sus acciones en la empresa, una participación de alrededor del 1%, al fondo de capital de los empleados.
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