2022 ha sido un mal año para todo el mercado y las criptomonedas no han sido menos. Bitcoin se ha dejado un 63% en 2022 y Ethereum un 69%. En otras palabras, Bitcoin arrancó el curso cotizando por encima de los 46.000 dólares y lo va a terminar por debajo los 17.000. Mientras que Ethereum […]
2022 ha sido un mal año para todo el mercado y las criptomonedas no han sido menos. Bitcoin se ha dejado un 63% en 2022 y Ethereum un 69%. En otras palabras, Bitcoin arrancó el curso cotizando por encima de los 46.000 dólares y lo va a terminar por debajo los 17.000. Mientras que Ethereum lo arrancó por encima de los 3.700 dólares por token y lo terminará por debajo de los 1.220 dólares. Una reducción notable de la cotización que, sin embargo, no debería sorprender a quienes conozcan el recorrido de este mercado.
Lo cierto es que Bitcoin, y el conjunto del mercado cripto, se han adentrado en el llamado ‘criptoinvierno’. Una fase bajista y de estabilización de las cotizaciones en el rango bajo. Por tanto, en 2023 la clave será si el criptoinvierno podría concluir para dar paso a una fase de acumulación ligeramente alcista, si seguirá la cotización bajista o si se podría ver un nuevo rally.
La clave técnica, según el consenso de mercado, estará en los 25.000 dólares por el lado alcista. De superarlos, en 2023 podríamos ver el inicio de un nuevo rally. Sin embargo, sino sucede eso, la otra vertiente podría llevar al Bitcoin a cotizar por debajo de los 10.000 dólares.
Cabe recordar, que de los 14 años de vida, 2022 fue el tercer año que Bitcoin acabó en rojo. A pesar de ello, el banco Standard Chartered muestra la versión más pesimista llevando al Bitcoin a los 5.000 dólares por moneda. Por su parte, el analista de mercado Michael van de Poppe situaba el precio en los 50.000 dólares para el curso entrante. Mientras que otro famoso inversor, Tim Draper, lo eleva hasta los 250.000 dólares.
Relief rally targets for Q2 2023 on #Bitcoin. pic.twitter.com/JD2dYqKcN3
— Michaël van de Poppe (@CryptoMichNL) December 3, 2022
Más allá de estas predicciones sobre el precio, lo cierto es que Bitcoin suele repetir unos patrones muy característicos en su cotización durante los 14 años que lleva en el mercado. De hecho, la media de las correcciones ha sido del 82%, actualmente no se habría llegado ahí, ya que llegar ahí sería irse a los 12.000 dólares por token. Mientras que, las recuperaciones medias suelen ser de un x15 desde mínimos. Esto supone que, cumplirse ambas medias, se podría llegar a los 180.000 dólares.
Lo cierto es que en los últimos rallys y correcciones ha habido más moderación. Por tanto, a tenor de las estadísticas, es probable que el suelo de Bitcoin esté por encima de los 12.000 y el nuevo techo por debajo de los 180.000.
Así pues, todo apunta a que será un año de consolidación del suelo y entada en la fase de acumulación para, probablemente, en 2023 o 2024 entrar en un nuevo rally. Pero, también dependerá de los factores externos, como la política monetaria, la inflación, el desarrollo de la renta variable – ya que tiene una gran correlación – y la regulación en ciernes.
Lo cierto es que en las criptomonedas existe una gran correlación y es más que probable que el movimiento de Bitcoin lo replique Ethereum, que además este año ha cambiado su protocolo de Proof of Work por el Proof of Stake. Los analistas de BTC Direct sitúan a la criptomoneda en los 5.000 dólares para 2023, por lo que podría romper máximos históricos.