Los bancos centrales han sido los protagonistas del mercado en los últimos años, según la mayoría de los analistas y los expertos financieros. La política acomodaticia llegó a principios de la década y está aquí para quedarse, tal y como indica el consenso de mercado. No se espera una subida de tipos para este año ni en la Reserva Federal ni en el Banco Central Europeo. De hecho, la tónica general es bajar tipos como están haciendo los principales bancos centrales de los países emergentes.
“Los bancos centrales están haciendo que se perpetúe la inflación de los activos de riesgo”, explica Daniel Lacalle, economista jefe de Tressis. “Están haciendo que países al borde de la quiebra se financien muy barato y están ayudando a que aumente la deuda de una forma exagerada”, destaca Lacalle. Sin embargo, “a pesar de que sus políticas no están consiguiendo los efectos que ellos quieren, no las van a cambiar”, sostiene el experto, que explica que si se retirasen los estímulos “se generarían muchos problemas, o eso piensan los reguladores”.
Banco Central Europeo
«El BCE ha dejado sin cambios su política y parece haber iniciado un período de inactividad, ya que su atención se centra en el Análisis Estratégico”, explica Paul Diggle, Economista Senior, Aberdeen Standard Investments. De hecho, la presidenta Lagarde ha dado el pistoletazo de salida en la revisión. “Esperamos que de este análisis resulte un nuevo objetivo de inflación, una explicación de cómo exactamente el BCE pretende cumplir con este objetivo y una aplicación de criterios ESG a la gestión del balance del BCE. En contra de la opinión general, creemos que el BCE reducirá los tipos de interés a finales de año, cuando concluya el análisis, para subrayar su compromiso de cumplir el objetivo de inflación», señala Diggle.
“Cuando Lagarde dice que están estudiando la situación de la política monetaria, se puede traducir en que como no han conseguido los objetivos de inflación que quieren, seguirán aumentando los estímulos, en lugar de cambiar la política”, sostiene Lacalle.
Reserva Federal
“No esperamos que el FOMC anuncie otro recorte de los tipos en su reunión del 28 y 29 de enero, gracias en gran parte al éxito de los tres recortes de seguro de la Fed durante 2019. La estabilización de la economía de los Estados Unidos justifica una extensión de la pausa de su política”, explica Franck Dixmier, director global de renta fija de Allianz Global Investors,
Esto supone que, a pesar de las presiones de Donald Trump, la Fed seguirá manteniendo los tipos. “La Reserva Federal ya ha demostrado su independencia. De hecho, seguramente las subidas de tipos de 2018, que sobre el papel no estaban del todo justificadas, fueron una reafirmación de la independencia que tiene el organismo. Por tanto, las presiones de Trump no cambiarán el curso”, comenta Ignacio Muñoz-Alonso, estratega jefe de Inversis.
Banco de Inglaterra
El Banco de Inglaterra podría anunciar el 30 de enero un recorte en los tipos de interés, aunque tampoco está descartado que los mantenga en el 0,75. Las sólidas proyecciones de crecimiento del BoE que se situaban en un 1.8% y 2.0% para 2021 y 2022, se basaban en la previsión de un Brexit suave que, según comenta David Page, Head of Macro Research & Core Investments en AXA Investment Managers, “es cuestionable”. Por ello, el experto de AXA IM pronostica solo “un crecimiento de 1% para 2021” a raíz de las recientes tensiones internacionales. Todo ello “puede llevar al BoE a un enfoque más cauteloso” que puede suponer “un recorte de tasas entre 0,25% y un 0,50% en enero”, según advierte Page, aunque, detalla, que “la política de tipos se mantendrá sin cambios el resto del año”.
2020-01-28 23:17:39