Hace apenas dos años que Bankia presentó un ambicioso Plan Estratégico 2018-2020 que tenía entre sus pilares una subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo y que, desde luego, no contemplaba que el coronavirus podía ocasionar una paralización de la economía mundial.
La primera grieta en sus planes la han sufrido también otras cotizadas españolas. La entidad que preside Ignacio Goirigolzarri se ha visto obligada a celebra su Junta de Accionistas en Madrid, y no en Valencia como suele ser habitual. Pero más allá de este hecho que puede resultar anecdótico, destaca el reconocimiento de que su plan no se va a cumplir.
Según ha explicado Goirigolzarri durante la Junta telemática, Bankia renuncia a «cualquier distribución de carácter extraordinario» durante este año. De ese modo, Bankia no podrá cumplir con su propósito de repartir 2.500 millones de euros en dividendos desde 2018 hasta 2020. Con respecto a este objetivo, el presidente ha reconocido que «es evidente que tiene que ser revisado y queda condicionado al efecto que pueda tener esta crisis».
En ese sentido, en un documento enviado a la CNMV, Bankia ya advierte de que mantendrá la «máxima prudencia» a su futura política de dividendos, ya que mantener un alto nivel de solvencia «va a ser totalmente prioritario» para el banco. No obstante, Goirigolzarri aclara que se estudiará a lo largo del año cómo «definir la retribución final del ejercicio».
En ese sentido, Goirigolzarri cree que mantener un alto nivel de solvencia resultará clave para poder contribuir a la recuperación de la economía española. “Es la mejor forma de anticiparnos a un entorno incierto y, además, es la mejor manera de tener un gran músculo financiero para ayudar y financiar nuestra economía, a las empresas y a las familias españolas”, ha dicho a los accionistas.
2020-03-27 12:16:55