Está claro que el Covid-19 dominó todos los aspectos de la vida cotidiana así como de los mercados financieros en el 2020. Pero no podemos centrarnos solo en eso. Tenemos que seguir haciendo frente a la crisis climática que amenaza cada día más no solo nuestro futuro financiero sino también nuestro modo de vida. 1. […]
Está claro que el Covid-19 dominó todos los aspectos de la vida cotidiana así como de los mercados financieros en el 2020. Pero no podemos centrarnos solo en eso. Tenemos que seguir haciendo frente a la crisis climática que amenaza cada día más no solo nuestro futuro financiero sino también nuestro modo de vida.
La pandemia del Covid-19 ha hecho que los inversores se fijen más en las cuestiones fundamentales que están afectando a la vida humana en todos los rincones del mundo. Estamos viendo un aumento de la demanda de bonos verdes, estrategias de renta variable sostenible y otros productos que les permiten contribuir directamente al cambio ambiental o social. Esta tendencia sólo irá a mejor, por lo que en NN IP estamos mejorando constantemente nuestros informes y alineamos nuestros procesos para satisfacer las necesidades de nuestros clientes.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2021 aumentará el sentido de urgencia para abordar las cuestiones climáticas. Imágenes de cielos azules claros en la fase inicial de la pandemia abrieron los ojos de la gente a lo que se puede lograr, así que desde NN IP creemos que habrá aún más presión sobre los gobiernos para intensificar sus esfuerzos. Para los inversores, es crucial tener una visión más amplia sobre el clima.
Creemos que cada vez será más común que las distintas gestoras de activos unan fuerzas para conseguir el cambio a través del compromiso y el diálogo. Europa está tomando la iniciativa en esto, pero también estamos viendo las primeras iniciativas sobre diversidad en Estados Unidos. Haciendo equipo con organizaciones sociales y gubernamentales, se puede tener más impacto en temas concretos que reflejan las prioridades de los inversores finales. Un buen ejemplo de 2020 fue nuestra firma de declaración de inversores para detener la deforestación en Indonesia y Brasil.
Hasta ahora, ha sido difícil para los inversores utilizar el voto para influir en las políticas ASG, pero todo apunta a que esto va a cambiar. Al igual que el voto sobre la política de retribución, las empresas empezarán a incluir decisiones sobre el clima o la diversidad como un elemento estándar en el orden del día de sus juntas de accionistas. Desde NN IP nos involucraremos activamente con las empresas para ayudarlas en su transición hacia modelos de negocio más sostenibles, y también continuaremos uniendo fuerzas con las organizaciones sociales para impulsar el cambio en temas específicos.
La acción regulatoria será una fuerza impulsora importante en la industria. El nuevo plan de acción de finanzas sostenibles de la UE requerirá que los gestores de inversiones demuestren cómo integran los factores ASG y cómo sus inversiones contribuyen a cambio sostenible. Esta tendencia se centrará en Europa por ahora, pero también afectará a empresas de otros lugares. En NN IP creemos que las gestoras de activos cada vez lanzarán más más productos de inversión que permitan al inversor final hacerle partícipe del cambio positivo.