"Los trabajadores de Volkswagen no van a pagar por la crisis", ha asegurado el responsable de las negociaciones del sindicato IG Metall, Harmut Meine, en referencia al escándalo de las emisiones del mayor fabricante de vehículos de Europa. A su juicio, se trata de un "buen compromiso" dados los "tiempos difíciles" que atraviesa Volkswagen y […]
Dirigentes Digital
| 20 may 2016
"Los trabajadores de Volkswagen no van a pagar por la crisis", ha asegurado el responsable de las negociaciones del sindicato IG Metall, Harmut Meine, en referencia al escándalo de las emisiones del mayor fabricante de vehículos de Europa. A su juicio, se trata de un "buen compromiso" dados los "tiempos difíciles" que atraviesa Volkswagen y que el aumento salarial no desbordará a la empresa.
Además, empresa y sindicatos acordaron prolongar hasta 2022 el sistema de jubilación gradual de la empresa, endureciendo alguna de las normas de aplicación, y dar una extra de 200 euros a los recién jubilados.
Volkswagen, que ha provisionado 6.500 millones de euros para afrontar los costes jurídicos derivados de la manipulación de las emisiones de NOx con un software que Volkswagen ha reconocido haber instalado en 9,5 millones de vehículos.
El ‘dieselgate’ mientras tanto, se extiende hacia otros 30 modelos de coches según la investigación realizada por el ministerio de Transporte alemán iniciada a raíz del caso Volkswagen, según el semanario alemán "Der Spiegel".Según la publicación, el Gobierno alemán -que por el momento no ha confirmado esta información- estaría ahora realizando nuevas pruebas de emisiones a los automóviles que han registrado resultados excesivos.
Este estudio, que afecta a vehículos de gasolina y diésel, es diferente del que también ha realizado Berlín para medir las emisiones del gas contaminante NOx (óxidos de nitrógeno) en más de 50 modelos diésel y cuyos resultados se difundieron recientemente.
De confirmarse, esta revelación tendría importantes repercusiones económicas, ya que el impuesto de circulación en Alemania está ligado al nivel de emisiones de CO2 y los vehículos que más contaminan deben pagar más. Si los fabricantes informaron valores falsos de emisiones, serían ellos quienes deberían abonar la diferencia, una cantidad agregada que según cálculos de la ONG Ayuda Medioambiental Alemana (DUH) citados por "Der Spiegel" podría elevarse a 2.200 millones de euros sólo en Alemania.
El semanario alemán sólo cita, de entre los 30 modelos afectados, el caso del Opel Zafira que ya denunció en su número de la semana pasada, del que dice que, en un examen en banco de pruebas emitió 127 gramos de CO2 por kilómetro, frente a los 109 que la casa admite que produce, un 16,5 % más. Opel, por su parte, ha asegurado a la publicación que en los test que realizó la casa a sus modelos no se sobrepasaron los límites legales de emisiones.