Con el liderazgo geopolítico en manos de otros, Europa tiene la firme intención de recuperar parte del liderazgo económico, que puede ser la llave para el resto de sus objetivos. Hay consenso mundial en que la economía debe transformarse para que el planeta sobreviva y en la Unión Europea se cree que la transición ecológica es el camino para conseguirlo.

En cada aparición pública, la máxima figura comunitaria y presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, se esfuerza por repetir que el Viejo Continente puede ser un referente en ese propósito. Además, esas declaraciones van acompañadas de hechos y, más que de hechos, de euros, que es lo que realmente puede transformar la economía europea.

Así lo confirman los datos del Banco Europeo de Inversiones, el brazo financiero de de la Unión Europea. En el último año, la financiación climática representó el 43% del total de dinero que prestó. En el caso de España, el porcentaje coincide, con dos datos más que hay que tener en cuenta: el porcentaje en 2020 para financiación climática fue del 38%; y la financiación del BEI en España se incrementó un 50%.

Si se trasladan estos porcentajes a cifras reales, la inversión total del BEI en España fue de 12.771 millones, de los que 3.897 millones se destinaron a financiar proyectos climáticos, tal y como explicó el vicepresidente del organismo, Ricardo Mourinho Félix. En contraste, las cifras de 2020 fueron más modestas, con una asignación total de 8.500 millones y 3.235 millones para la acción climática.

Aunque el vicepresidente ya advierte que será difícil que se repitan estos números en 2022, las aspiraciones en el ámbito del medio ambiente se incrementan. De hecho, anunció que las acciones de este segmento acapararán el 50% de la acción del BEI en 2025. En particular, destacan los proyectos centrados en energías renovables, de transporte limpio, eficiencia energética e infraestructuras que conduzcan a la descarbonización.

Para Félix, no se trata de "poner millones y millones, lo importante es el impacto". En ese sentido, el BEI se va a enfocar en la transformación de la economía. "Eso es lo que miramos", insiste el vicepresidente. No obstante, la entidad espera retirar parte del dinero que ha puesto sobre la mesa en 2021, en parte por la esperanza en que "las empresas van a tener una situación más normal y no tendrán los problemas que han sufrido en 2020 y 2021", resume.

1% del PIB

Los caudales que el Banco Europeo de Inversiones ha puesto sobre la mesa en España representan el 1% del PIB del país, y lo convierten en el tercer principal receptor de inversiones a nivel europeo. El sector principal al que se han dedicado estas inversiones es el de pymes y empresas de mediana capitalización. En total, se han desembolsado 7.250 millones de euros que, en algunos casos, coinciden con la financiación verde que ya se menciona en este artículo.

Asimismo, aparecen otros fines como la innovación y el desarrollo que, para Félix, será "clave para una recuperación sostenible". Por último, cabe destacar el apoyo a las administraciones públicas, y también a entidades privadas, en la superación de la crisis sanitaria. En particular, la esperada vacuna española desarrollada por Hipra, también ha recibido financiación para poder poner en marcha el equipamiento suficiente para fabricar la vacuna.

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