La trayectoria de Marta Palmeiro no se puede resumir en un par de frases. Comenzó su carrera profesional dentro de Banca de Inversión, en Credit Suisse, donde trabajó durante más de una década y llegó a ocupar el cargo de vicepresidenta del departamento de Mercado de Capitales. Tras su paso por esta empresa suiza, en […]
Gestión y LiderazgoDirigentes Digital
| 27 ene 2022
La trayectoria de Marta Palmeiro no se puede resumir en un par de frases. Comenzó su carrera profesional dentro de Banca de Inversión, en Credit Suisse, donde trabajó durante más de una década y llegó a ocupar el cargo de vicepresidenta del departamento de Mercado de Capitales. Tras su paso por esta empresa suiza, en 2016 se incorporó a Pier Partners, una boutique especializada en decisiones estratégicas y financieras donde también se hizo socia. En una conversación con DIRIGENTES, relata que, como “apasionada” de la inversión en start-ups y “entusiasta” de las criptomonedas, se especializó en estrategia empresarial fintech y blockchain, a través del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y la Universidad de Oxford, respectivamente.
Más tarde, en 2018 pasó a formar parte de la junta directiva de Portugal Fintech, una ONG que supervisa el desarrollo del ecosistema fintech del país luso y, en 2019, cofundó StudentFinance “ante la necesidad de democratizar y facilitar el acceso a una educación de calidad”. Con este recorrido a sus espaldas, en 2020 recibió el premio ‘Mujeres emprendedoras’ como reconocimiento a su trayectoria profesional.
Como directora Financiera de StudentFinance explica que se encarga de la captación de fondos, financiación de deuda, gestión de riesgos e informes financieros, así como de mantener la regulación exigida en cada uno de los mercados en los que operan. De este modo, Palmeiro comenta que la creación de esta start-up estuvo motivada por tres aspectos fundamentales. El primero hace referencia al “profundo cambio que ha experimentado el mercado laboral en los últimos años, donde la demanda de perfiles más especializados y en constante formación crece exponencialmente”. Un motivo por lo que reciclarse profesionalmente resulta “indispensable”.
Además, en este punto también destaca su intención de cubrir la necesidad de las empresas que demandan talento especializado en economía digital, así como la posibilidad de dar acceso a la educación a aquellas personas que quieren formarse en las profesiones emergentes, reciclarse dentro del mercado laboral o hacer un upgrade en su carrera, donde cobra especial importancia el surgimiento del reskilling y el upskilling.
Para la experta, en segundo término, se encentran los costes, entendidos como una “gran barrera” que deja fuera a una buena parte de la población. Y, en último lugar, subraya la necesidad de importar un modelo que en otros países como Estados Unidos, Reino Unido o Alemania ya se está consolidando y que podría contribuir a la “democratización de la educación”. Unido a esta última idea, la CFO señala que, a raíz de la crisis económica de 2008, el gasto del conjunto de las Administraciones Públicas en Educación se redujo en España. Y, de la misma forma, como consecuencia de la COVID-19, en 2022 “caerá por segundo año consecutivo”.
“Según los datos que el propio Ministerio de Hacienda plasmó en el Plan Presupuestario remitido a Europa, el desembolso en Educación se reducirá casi 600 millones. Esto se traduce en la bajada del número de becas, la reducción de las cuantías de las ayudas y el incremento de las tasas universitarias y la matrícula”, indica.
Con la intención de abordar sus objetivos utilizan una modalidad de pago flexible, conocida como ‘Acuerdo de Ingresos Compartidos’ o ‘ISA’ que ofrece la oportunidad para “empezar a construir su futuro hacia una independencia económica y personal”. En este sentido, el sistema se basa en un acuerdo que permite a los estudiantes financiar su educación, de manera que el alumno “solo paga cuando sus ingresos superan el umbral mínimo acordado”.
Así, estos “completan su etapa formativa a un costo mínimo o nulo por adelantado y, una vez que ganan por encima de la cantidad acordada, comienzan a reembolsar el valor o coste de esa educación con un porcentaje fijo de sus ingresos brutos mensuales durante un período de tiempo definido”. Palmeiro también explica que, a lo largo de todo este proceso, se tiene en cuenta la situación económica de cada persona. Por ello, si en alguna etapa de la madurez del contrato ISA el candidato percibe unos ingresos brutos por debajo del mínimo establecido, “se congela la financiación y no tiene que volver a empezar a pagar hasta que supere ese mínimo de ingresos nuevamente”.
Para que esto sea posible, también contribuyen a la inserción laboral de los participantes una vez acabada su etapa formativa: “Gracias a nuestro equipo tecnológico y de soporte, los acompañamos en el proceso de búsqueda de empleo. Mantenemos un contacto constante con cada uno de los estudiantes a través de reuniones y envío de ofertas adaptadas a su perfil para incorporarlos al mercado laboral lo más rápido posible”.
En relación con las ramas de conocimiento impulsadas desde Student Finance, Palmeiro aclara que su objetivo está centrado en enfocarse en los sectores más demandados por el mercado profesional, con el fin de que los alumnos “puedan optar a una tasa de empleabilidad que se acerque lo más posible al 100%”. Así, su iniciativa está compuesta por programas de formación relacionados con el ámbito digital o tecnológico, tales como el marketing digital, el diseño UX/UI, la ciberseguridad y el blockchain.
Y, para poder optar a formar parte de este programa, la organización marca dos requisitos: ser mayor de edad y tener permiso de trabajo en España. No obstante, también recalcan la motivación con la que deben contar los futuros estudiantes para superarse profesionalmente. Para lo cual, realizan un “exhaustivo” estudio a través de un proceso de scoring y background check a través del que validan cada uno de los documentos aportados.
En esta línea, Palmeiro destaca que una de sus grandes diferencias con respecto a las entidades bancarias o de préstamos es que, para acceder a la financiación, “no requerimos perfiles con trabajo y/o respaldo económico”. Para lo cual, “basamos nuestro modelo en el potencial futuro de los candidatos analizando sus perfiles según la escuela, el programa y su salida en el mercado laboral”.
