La Navidad se caracteriza por muchas cosas y las comidas de empresa constituyen uno de los actos más comunes en el mundo laboral durante estas fechas. Son encuentros donde se suelen plantear dudas sobre cómo vestir, cómo actuar, si beber o no, y todo ello a veces nos hace vacilar sobre si asistir o no. […]
Dirigentes Digital
| 17 dic 2018
La Navidad se caracteriza por muchas cosas y las comidas de empresa constituyen uno de los actos más comunes en el mundo laboral durante estas fechas. Son encuentros donde se suelen plantear dudas sobre cómo vestir, cómo actuar, si beber o no, y todo ello a veces nos hace vacilar sobre si asistir o no. Sin embargo, es posible disfrutar de este momento sin por ello tener que pasar un mal rato. Sólo hay que estar atento a una serie de pequeños detalles.
Cómo vestir
Este es un tema que variará en función del tipo de evento que haya escogido tu compañía. No es lo mismo una comida que una cena, aunque probablemente en el primer caso se prolongue hasta la noche. En cualquier caso, lo primero que tienes que hacer es preguntar a los organizadores del encuentro, y después consultar con los compañeros de más confianza para saber qué atuendo van a elegir. Así, con todos estos datos ya podrás acudir a tu armario, que seguro encontrarás el conjunto idóneo para este momento. Lo ideal en estos casos es saber adaptarse al estilo y poder resaltar pero sin llamar demasiado la atención.
Modera el consumo de bebidas alcohólicas
Esta es la gran duda ¿bebo o no bebo alcohol? Se puede beber alcohol en una comida de empresa navideña, pero es mejor que lo hagas con moderación. Has de recordar que el alcohol provoca la pérdida del control y puede desencadenar comportamientos que en el ámbito del trabajo no son bien visto. Debes tener presente en todo momento que no estás compartiendo un rato con los colegas de siempre.
¿Con quién me siento?
Si puedes escoger con quién compartir tu asiento en la mesa no tendrás ningún problema, pues decidirás estar con los compañeros con los que te lleves mejor. Pero si esto no es posible, deberás tratar de mantener las formas lo mejor que puedas. Si has decidido acudir a la cena de la empresa éste es un riesgo que debes de correr, por lo que vete pensando en mostrar tu lado más amable para saber gestionar con inteligencia esta situación tan incómoda.
Evitar temas delicados
En estas reuniones cuanto menos profundos sean los temas de conversación casi que mejor. La política, la religión o las cuestiones vinculadas al trabajo deberían estar prohibidas en estas situaciones, sobre todo, porque son las que más controversias generan. De modo que trata de evitarlos y si al final salen, intenta ser lo más ecuánime posible.
Amplia tus relaciones
Tal vez sea el momento para intentar ampliar tus relaciones dentro de la empresa. En la oficina resulta complicado entablar conversaciones y conocer con más detenimiento a tus compañeros de trabajo. Este es el momento idóneo para acercarte a estas personas con las que no sueles tener mucho contacto.