Anne-Sophie Pic es una mujer amante de la vida, reveladora de gustos, apasionada, curiosa y con talento. Es la personificación de una pasión familiar por la gastronomía, una historia de fusión de sabores y del placer de compartir que nació hace un siglo con su bisabuela Sophie. En 1889 abrió su restaurante, L’Auberge du Pin, […]
Dirigentes Digital
| 13 ene 2022
Anne-Sophie Pic es una mujer amante de la vida, reveladora de gustos, apasionada, curiosa y con talento. Es la personificación de una pasión familiar por la gastronomía, una historia de fusión de sabores y del placer de compartir que nació hace un siglo con su bisabuela Sophie. En 1889 abrió su restaurante, L’Auberge du Pin, donde ofrecía sus platos y, más adelante André, el abuelo de Anne-Sophie, creó lo que se convertiría en la Maison Pic y en 1934 se convirtió en uno de los primeros chefs galardonados con tres estrellas por la Guía Michelin. Finalmente, Jacques, su padre, tomó las riendas de la Maison en 1957 y obtuvo también las 3 estrellas en 1973, cuando Anne-Sophie tenía 3 años. Es Jacques quien da vida al carácter distintivo de los Pic, una revolución de la cocina con originales combinaciones gustativas. Una historia familiar única que ha visto a cada generación ganar sus estrellas y dibujar con el tiempo una auténtica constelación de la gastronomía francesa.
“Me encanta la idea de que una sustancia, un ingrediente, puede mostrar diversas facetas gracias a diferentes técnicas. Combinar los aromas para explorar todas las posibilidades de los sabores. Es como si se revelara lo mejor de cada elemento, como si, a través de su fusión, de su transformación, se volvieran aún mejores. Una búsqueda del potencial de cada ingrediente. Un campo de experimentación y de alianzas infinitas. Encontrar el equilibrio, transformar un producto, una cocina y desvelar su infinidad visible e invisible. Estos son los paralelismos que observo en la fusión de los materiales de Hublot, en ese tenue vínculo que el relojero teje entre lo visible y lo invisible, la técnica delicada y minuciosa, ese pequeño y sutil infinito, el hecho de que, como en cocina, surge la armonía merced a una asociación única. Ellos cuentan con su laboratorio de innovación y yo con un laboratorio de investigación culinaria porque ambos adoramos superar los límites, salir de nuestra zona de confort para explorar nuevos terrenos creativos.
También nos une nuestra pasión por crear, causar y compartir emociones. Nos dejamos impregnar por las sustancias que nos rodean para crear belleza y llegar a los sentidos. Representamos un legado, construimos una historia, escribimos a nuestra manera una página de la gastronomía, de la relojería, sin pretensiones, solamente con mucha pasión.” Anne-Sophie Pic. Chef con 3 estrellas Michelin y embajadora de Hublot
Cuando Anne-Sophie Pic afirma que cocinar para nuestros seres queridos es la mayor prueba de amor, podemos sentir toda la generosidad y el gran corazón de esta hedonista familiar.
Nuestras filosofías comparten numerosas similitudes: nuestra visión de la relojería encarna el Arte de la Fusión, mientras que su visión de la gastronomía se expresa en el Arte de la Impregnación. Dos términos diferentes para reflejar una perspectiva similar, la de revelar, transformar y superar los materiales, los ingredientes, los productos.
Su experimentación se asemeja a la de Hublot en la transformación de los materiales, ya sea por fusión, vaporización o sublimación. Se trata de la misma alquimia inspiradora e ilimitada, de esa experimentación continua, de la búsqueda por superar los aspectos visibles de los materiales, de los ingredientes, para desvelar lo invisible.
Es una mujer que representa el valor de la complementariedad y el espíritu de equipo que caracterizan a Hublot. Anne-Sophie Pic personifica una visión única y diferente de la cocina. Al salir de su zona de confort, arriesgarse y superar los límites, logra progresar, innovar y escribir páginas completamente inéditas en la historia de la gastronomía, como la de ser la chef con más estrellas Michelin del mundo y la única mujer francesa galardonada con tres estrellas Michelin. Pero Anne-Sophie Pic va mucho más allá de las estrellas.” Ricardo Guadalupe. CEO de Hublot
Es una historia que incluye a la madalena de Proust y el corazón de la familia Pic, una pasión por la gastronomía que Anne-Sophie observó desde su ventana, atraída una y otra vez por la emoción. La misma que heredó de su padre, quien le ayudó a desarrollar su gusto y su olfato para formar su increíble memoria sensorial. Su cocina está dedicada a él, quien la dejó demasiado pronto, así como a la historia y al legado de su familia, cuyo destino está profundamente ligado al de los sabores, visibles e invisibles, que Anne-Sophie no deja de revelar, transformar y que impregnan su cocina.
Autodidacta, instintiva e intuitiva, combina sabores inéditos, adora los gustos que se salen de lo común y los ingredientes menospreciados u olvidados. La chef de Valence lleva la cocina en la sangre y la invención y la creatividad en el corazón. Aunque las 3 estrellas brillan en su firmamento desde 1997, es la chef más galardonada con este premio del mundo, con 8 estrellas entre sus 4 restaurantes de Valence (***), París (*), Lausana (**) y Londres (**). Puede que Anne-Sophie Pic naciera bendecida por las estrellas, pero lo que es seguro es que ha sabido superar su destino. Con humildad, continúa reinventándose constantemente sin perder la esencia de su identidad. Todavía no ha terminado de poner a prueba los límites de las estrellas y de grabar su nombre en el firmamento de la gastronomía. Se habla de su imperio culinario, pero para ella es más bien como el árbol genealógico de su familia que ha cultivado junto a su marido, David Sinapian, y lo ha transformado de una empresa familiar a un grupo donde la identidad humana prevalece mientras se multiplican sus competencias.
Se trata de una historia de sentidos, olfato y gusto. Con libertad y valentía, pasión y sensibilidad, Anne-Sophie se deja guiar por su intuición, al igual que por su absoluta integración en la cocina, y observa cómo la fusión y el diálogo de los productos impregnan los platos y las bebidas para crear una simbiosis total entre aromas y sabores.
Una reina en su juego y, sobre todo, una mujer con un gran corazón que pone toda su generosidad en sus platos y los considera como pedazos de felicidad que deleitan los sentidos. Una persona sensible que quiere llevar este placer del sabor a aquellos que no pueden disfrutarlo; por ello, ha creado un fondo solidario «Donnons du goût à l’enfance» (Pongámosle sabor a la infancia) con un hogar destinado a acoger a niños que padezcan patologías ligadas al gusto.