La compañía Deoleo, propietaria de marcas como Koipe y Carbonell, ha conseguido dar luz verde a su plan de rescate. Según ha informado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el 79% de las entidades acreedoras ha logrado alcanzar un acuerdo para refinanciar la deuda actual por valor de 575 millones de euros y […]
NacionalDirigentes Digital
| 27 sep 2019
La compañía Deoleo, propietaria de marcas como Koipe y Carbonell, ha conseguido dar luz verde a su plan de rescate. Según ha informado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el 79% de las entidades acreedoras ha logrado alcanzar un acuerdo para refinanciar la deuda actual por valor de 575 millones de euros y que supondría una reducción de la misma de 330 millones de euros.
“El grupo contará con nuevos recursos y una nueva estructura societaria y financiera que le permitirá cumplir con sus compromisos financieros y obtener la estabilidad necesaria a largo plazo para seguir desarrollando su plan de negocio”, aseguran al respecto, al tiempo que añaden que se trata de un “hito histórico” que les da optimismo después de tener que verse obligados a reducir capital en la anterior Junta General de accionistas.
De este modo, la operación de refinanciación contempla una reorganización societaria del grupo con una inyección de fondos propios que se materializará a través de una ampliación de capital de 50 millones de euros. En cualquier caso, éstos se destinarán a repagar el endeudamiento financiero existente. Posteriormente, se llevará a cabo una reducción de capital cero con el objetivo de compensar pérdidas, se capitalizará gran parte de la deuda actual y se refinanciará la deuda restante, para alargar su vencimiento.
‘Operación Acordeón’ es el nombre que recibe la citada ampliación de capital en la que su principal accionista, CVC, se ha comprometido a asegurar hasta 40 millones de euros. De manera adicional, también se emitirán warrants a favor de accionistas minoristas que hayan reconocido derecho de suscripción preferente en la ampliación.
En este sentido, la idea pasa por reducir la deuda sindicada en 333 millones de euros. Esto es posible gracias a la citada ampliación de capital, así como a la capitalización de hasta 283 millones de euros a cambio del 49% del capital social de la nueva compañía resultante. En cambio, los 242 millones de euros de deuda restante serán considerados como deuda sostenible y permanecerán como deuda financiera a largo plazo. También gozarán de unos vencimientos mayores con respecto a los actuales.
La letra pequeña de dicha reestructuración supone la creación de una nueva filial en la que las entidades acreeedoras pasarán a controlar el 49% del negocio de Deoleo. El porcentaje restante estará en manos de accionistas que acudan a la ampliación de capital y que incluye a tenedores de participaciones preferentes.