El compromiso con el medio ambiente por parte de los negocios de menor tamaño no los posiciona en el mejor lugar. Según los últimos datos recogidos por la herramienta digital TÜV SÜD, en donde las empresas se pueden registrar para autoevaluar su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), de las pymes que se […]
AutónomosDirigentes Digital
| 13 jun 2022
El compromiso con el medio ambiente por parte de los negocios de menor tamaño no los posiciona en el mejor lugar. Según los últimos datos recogidos por la herramienta digital TÜV SÜD, en donde las empresas se pueden registrar para autoevaluar su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), de las pymes que se habrían registrado para hacer un seguimiento de su efecto contaminante, un 60% habría reconocido no estar tomando ninguna medida para hacer frente a ello.
Son las pequeñas y medianas empresas de España las que, de todas las analizadas, menos medidas ponen a su efecto contaminante. Negocios de diferentes sectores como el de automoción, transporte, construcción o turismo, y de todas ellas, son las de menor tamaño las menos avanzadas en cuanto a sostenibilidad.
Poner en marcha medidas de sostenibilidad es la asignatura pendiente de estos negocios. La ausencia de políticas empresariales que luchen, de manera interna y externa, contra el cambio climático es uno de los principales problemas que se registran en las pymes, pero no el único. Apostar por medidas que, además midan la mejora de este tipo de políticas en pequeños y medianos negocios, también influiría de manera positiva en este cambio para los ODS.
Poner de manifiesto las pautas para luchar a favor de las necesidades actuales, globales e internas, dentro de la empresa, que a su vez estuviera expresando el interés de la sociedad por conformar una organización transparente, impulsaría a pymes y autónomos a evolucionar social y empresarialmente.
Que las empresas de pequeño y mediano tamaño no cuenten con unas metas a alcanzar en cuanto a sostenibilidad, dentro de su plan estratégico, obstaculiza que se conviertan en un negocio ecofriendly. Apostar por una política medioambiental, con metas alcanzables, que les permita cuantificar los objetivos alcanzados en materia de sostenibilidad, impulsaría su valor como entidad en el tejido empresarial.
El compromiso debe partir desde la dirección de la pyme y la sociedad autónomo y, es ahí, donde radica uno de los principales problemas en la inmensa mayoría de estos negocios. No existe un departamento interno encargado de direccionar la mejora en estos planes de desarrollo; ni tan siquiera un compromiso estipulado para una Estrategia de Sostenibilidad. Todo ello hace imposible que exista un avance como grupo hacia una evolución en este tipo de políticas sostenibles.
Carecer de un plan real, que la empresa se comprometa a cumplir, es fundamental hoy en día para la continuidad de la pyme. La falta de conocimiento en este tipo de políticas y la escasez en la formación en cuanto a medidas sostenibles es uno de los principales fallos para que este sector, no apueste por la mejora de la sociedad y el propio planeta.
El Banco Mundial se ha referido a las pymes en reiteradas ocasiones como empresas de vital importancia para una economía sostenible. No solo la creación de los ODS y los Diez Principios del Pacto Mundial han supuesto un punto de inflexión en ellas, sino que suponen un marco de referencia para que este 99,9% del tejido empresarial español pueda identificar cuáles son las estrategias a implantar en su negocio, cómo actuar y las posibles adversidades a las que se pueden enfrentar.
Por una parte, la formación de la propia pyme y sus empleados a través de programas aceleradores de impacto, o basándose en los Objetivos de Desarrollo Sostenible es primordial para comenzar a ser una pyme concienciada con la sostenibilidad. Apostar por expertos o manuales que ayuden a conseguir sus políticas implantadas será clave para ello.
A su vez, elaborar un informe de sostenibilidad adecuado a la actividad, tamaño y posibilidad de la empresa, será fundamental para el éxito de sus metas medioambientales. Una revisión anual de dicha memoria, facilitará la labor de conocer con exactitud el avance de la pyme en materias de sostenibilidad, pudiendo poner en valor lo conseguido como empresa que progresa.