La seguridad en internet es un asunto que tiene preocupado a todos los actores que participan en internet, empresas, organismos públicos y consumidores. Pero tenerla garantizada al 10% resultad prácticamente imposible. Según un estudio llevado a cabo entre miles de usuarios de 21 países de los cinco continentes, más de la mitad de las respuestas, […]
Dirigentes Digital
| 13 may 2019
La seguridad en internet es un asunto que tiene preocupado a todos los actores que participan en internet, empresas, organismos públicos y consumidores. Pero tenerla garantizada al 10% resultad prácticamente imposible.
Según un estudio llevado a cabo entre miles de usuarios de 21 países de los cinco continentes, más de la mitad de las respuestas, el 56% de las personas considera que la privacidad completa en el mundo digital moderno es imposible.
Y todo ello a pesar las regulaciones que se están implantando en la mayor parte de los países desarrollados, como la Regulación General de Protección de Datos de en Europa, la famosa GDPR.
Cada vez es más habitual que más y más operaciones se ejecuten a través de internet, y los usuarios y los estados les indican habitualmente a los usuarios que tienen que proteger sus datos personales y confidenciales, pero la gente está aún más preocupada por lo que ocurre en el mundo físico que les rodea que lo que pasa en ciberespacio.
Menos de la mitad de los consumidores, un 41%, están más preocupados por lo que ocurre con su datos en línea que fuera de ella. En cualquier caso, los que están preocupados por el delito en internet se sienten aún peor por la aparición constante de robos de datos o amenazas cibernéticas que llegan a los titulares, lo que hace dudar a la mente “Incluso el usuario más experto en tecnología”, escriben los autores del informe.
En gran parte, los recientes escándalos de datos de alto perfil en redes sociales como Facebook han descendido lo que podría haber reforzad la confianza de los consumidores de que su información digital podría ser absolutamente de confianza. De hecho, la investigación encontró que el 26% de las personas han tenido acceso a sus datos privados por parte de alguien sin su consentimiento, llegando a casi un tercio (31%) para aquellos que tienen entre 16 y 24 años de edad.
Absolutamente convencidos de que las empresas son incapaces de garantizar por completo la privacidad, cuatro de cada diez personas han señalado que intercambiarían sus datos privados por pagos, incluso si eso suponía dar a un completo extraño acceso completo a su información. Además, casi dos de cada 10 (18%) de los encuestados dijeron que entregarían sus datos si recibían algo gratis a cambio. Una práctica cada vez más habitual en internet.