La Directora Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Kristalina Gueorguieva, ha dado este martes importantes pistas sobre en qué situación está la recuperación post-covid y cuáles son los próximos pasos que se deberían dar, a su juicio, en política monetaria.
Así, Gueorguieva, que ostenta el cargo del FMI desde el año 2019, ha señalado desde Washington y en un evento organizado por la Universidad Bocconi en Italia, que los bancos centrales tienen la responsabilidad de comunicar claramente sus intenciones de política monetaria a medida que van adoptando políticas monetarias más estrictas.
«Los principales bancos centrales tienen la responsabilidad de comunicar claramente sus medidas políticas”, ha matizado la mandataria según informan desde Reuters y ha aclarado: “Los bancos centrales deben estar preparados para endurecer la política monetaria rápidamente si la recuperación se fortalece más rápido de lo esperado o si se hacen tangibles los riesgos de aumento de la inflación”.
Europa, más preparada para evitar otra crisis de deuda soberana
La Gerente del FMI también ha destacado en su ponencia que “se espera que el crecimiento económico mundial en 2021 esté ligeramente por debajo de la previsión de julio del 6% de crecimiento”, pero ha hecho hincapié en que las economías avanzadas volverán a los niveles anteriores a la pandemia en 2022. Sin embargo, ha querido recalcar que la mayoría de los países emergentes y en desarrollo tardarán “muchos más años” en recuperarse.
Y es que la experta considera que la consolidación fiscal y el crecimiento a medio plazo situarán a Europa en una base sólida para evitar otra crisis de la deuda soberana, todo ello a pesar del aumento de los niveles de endeudamiento provocado por la pandemia del COVID-19.
Así, la entendida ha recalcado que Europa está en mejores condiciones para evitar otra crisis de deuda como la que enfrentó Grecia tras la crisis financiera mundial de los años 2007 y 2008.
Eso sí, también ha considerado destacar que los países tendrían que planificar cuidadosamente cómo cambiar el rumbo hacia la consolidación fiscal a medio plazo para borrar la creciente carga de la deuda relacionada con la pandemia. De hecho, ha indicado que espera que las presiones inflacionistas disminuyan en la mayoría de los países en 2022, aunque es probable que continúen en algunas economías emergentes y en desarrollo.
La brecha de la vacunación entre países pobre y ricos: también un desastre en términos económicos
Y aunque es bien sabido que la brecha entre las tasas de vacunación Covid-19 entre los países pobre y ricos es un drama a nivel sanitario, lo cierto es que también tiene desastrosas consecuencias para el PIB mundial.
De hecho, Georgieva afirma que si no se cierra la brecha de la vacunación, las pérdidas del PIB mundial podrían ascender a 5,3 billones de dólares en los próximos cinco años.
Y ha matizado:»Las naciones ricas deben aumentar el suministro de dosis de Covid-19 al mundo en desarrollo, eliminar las restricciones comerciales y cerrar la brecha de 20.000 millones de dólares en la financiación de las pruebas, el rastreo y a nivel terapéutico».
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2021-10-05 17:40:07