El crecimiento económico ha sido más bajo de lo que esperada el Banco Central ruso en la primera parte del ejercicio y la entidad ha tomado cartas en el asunto. A escasos días de que los ojos de todo el mercado se posen en la reunión de la FED y en sus comentarios sobre cuándo podrían verse rebajas en EE.UU., la máxima entidad monetaria rusa ha optado por bajar tipos hasta el 7,5 por ciento y por advertir de que puede haber más movimientos.
La junta directiva del banco emisor ruso ha dejado claro que existe la posibilidad de que se lleve a cabo otra bajada de tipos en alguna de las próximas reuniones del organismo, con la idea de caminar hacia una política monetaria más neutral hacia mediados del año que viene.
Desde la entidad rusa subrayan que el cambio en las guías de la FED, que ha optado por descartar subidas del precio del dinero y por admitir que incluso podría bajarse, minimiza los riesgos de que se lleven a cabo salidas de capital de los mercados emergentes, entre los que se sitúa Rusia.
La inflación rusa se ha colocado en el 5,1 por ciento en el mes de mayo, una décima por debajo de la registrada en abril. Un descenso que el banco Central ruso achaca a la evolución en la demanda de los consumidores y a factores puntuales, como puede ser la apreciación de la moneda: el rublo.
2019-06-14 13:53:53