El futuro de Europa depende de su capacidad para ser independiente en lo que a tecnología se refiere. Ese es el punto de partida de Bruno Le Maire y Peter Almaier, ministros de economía de Francia y Alemania, para tratar de articular una nueva estrategia europea en lo que se refiere a capacidad industrial y […]
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| 19 feb 2019
El futuro de Europa depende de su capacidad para ser independiente en lo que a tecnología se refiere. Ese es el punto de partida de Bruno Le Maire y Peter Almaier, ministros de economía de Francia y Alemania, para tratar de articular una nueva estrategia europea en lo que se refiere a capacidad industrial y de producción.
“Si Europa quiere seguir siendo una potencia industrial en 2030, necesitamos una verdadera política industrial europea”. Esto es lo que dice el manifiesto de los dos ministros, que recoge un total de catorce pasos a seguir para que Europa trabaje en común en ese propósito. En particular lo subraya Le Maire, al decir que “nuestra soberanía política depende de nuestra soberanía tecnológica”.
De esa forma, los dos países han acordado definir una estrategia industrial que propondrán al resto de países europeos. Entre las principales prioridades se encuentra realizar una inversión “masiva” en innovación, además de “adaptar” el marco normativo europeo, que en la práctica significa igualar la regulación para el conjunto de la Unión Europea.
En tercer lugar, Le Maire señala entre sus objetivos “establecer medidas efectivas para defender las tecnologías, las empresas y los mercados” europeos. Asimismo, el ministro francés cree que este es el primer gran acuerdo tecnológico a nivel europeo desde la creación de Airbus.
Por otra parte, en el manifiesto, que lleva por nombre “Manifiesto francoalemán por una política industrial europea adaptada al siglo XXI”, los dos ministros explican que no existe alternativa: “La elección es simple: unir fuerzas o dejar que nuestra capacidad industrial desaparezca”.
En particular, Le Maire y Almaier proponen la creación de un consorcio europeo de generación de baterías que esperan que obtenga el visto bueno durante el primer trimestre de este año, lo que consideran una “tecnología crítica” para que Europa siga siendo “independiente y soberana”. Junto a eso, quieren que Europa lidere los avances en inteligencia artificial y reformar la zona euro.