Oi, la empresa telefónica de mayor cobertura territorial en Brasil, contrató tres consultoras (Boston Consulting Group, Bank of America Merrill Lynch y Oliver Wyman) para definir qué tamaño, forma y rol tendrá en la transformación digital por la que pasa el sector con el advenimiento del 5G. La telefónica, que se encuentra en un gran […]
InternacionalDirigentes Digital
| 05 abr 2019
Oi, la empresa telefónica de mayor cobertura territorial en Brasil, contrató tres consultoras (Boston Consulting Group, Bank of America Merrill Lynch y Oliver Wyman) para definir qué tamaño, forma y rol tendrá en la transformación digital por la que pasa el sector con el advenimiento del 5G.
La telefónica, que se encuentra en un gran plan de reestructuración, podría vender activos como 6.000 km de fibra óptica, cinco centros de datos y 400 torres, entre otras opciones que los consultores analizan junto con el directorio. El veredicto se dará a conocer en junio.
En 2018, su ingreso neto total fue de € 5093 millones, un 7,3% menos que en 2017. Los segmentos residencial, movilidad personal y B2B “siguen siendo impactados por la caída del tráfico de voz”, dijo la compañía en su informe anual, presentado el 27 de marzo, en el que destaca, no obstante, el crecimiento de datos móviles y TV de pago.
LA DEUDA Y LA ERA DIGITAL
“Estamos explorando todas las posibilidades de generar valor y eso incluye vender la operación móvil, parte de la fija y las redes de cobre y de fibra óptica”, dijo Carlos Brandão, su director financiero, al diario O Globo a propósito de la publicación de los estados contables.
Reuters, por su parte, señala que Oi (que significa Hola, en portugués) quiere volver a aumentar sus ingresos en 2021, cuando habría aumentado el gasto de capital (Capex) para impulsar sus redes de banda ancha y móviles. El débil resultado actual se atribuyó a la subinversión en su red.
Bank of America Merrill Lynch, en tanto, tiene la misión de “estructurar operaciones para maximizar la creación de valor y ampliar las fuentes de financiamiento para su plan de inversión, enfocándose en FTTH (sigla inglesa para Fibra a la casa del cliente) y 4.5G”.
EL DESAFÍO DE REDUCIR
Oi entrega sus servicios (telefonía fija, móvil, banda ancha, TV, datos e internet, red de transporte y backbone internacional) en tres segmentos: residencial, movilidad personal y B2B. A final de 2017, esa base de clientes llegaba a 59,7 millones, según su reporte corporativo.
La empresa espera que una reforma en el sistema de telecomunicaciones le permita vender activos que hoy, legalmente, no puede, indicó Bloomberg. Con la nueva ley podría economizar, además, unos € 203 millones y, finalmente, deshacerse de los activos ociosos y aligerar su estructura corporativa.