La agitación que ha sacudido al BBVA durante los últimos meses está llevando a sus altos cargos a tomar decisiones que representan un punto y aparte con los gestores anteriores. Para la que será su segunda Junta de Accionistas como presidente, Carlos Torres propondrá tres nuevos nombramientos para el Consejo de Administración. Dichos cargos, tal […]
NacionalDirigentes Digital
| 11 feb 2020
La agitación que ha sacudido al BBVA durante los últimos meses está llevando a sus altos cargos a tomar decisiones que representan un punto y aparte con los gestores anteriores. Para la que será su segunda Junta de Accionistas como presidente, Carlos Torres propondrá tres nuevos nombramientos para el Consejo de Administración.
Dichos cargos, tal como se anuncia en la convocatoria de la Junta de Accionistas del banco, convocada para el 13 de marzo, se especifica en el orden del día que se espera aprobar los nombramientos de Raúl Galamba de Oliveira, Carlos Salazar y Ana Revenga. El primero es un dirigente portugués especializado en servicios financieros y cuya experiencia se ha concentrado en McKinsey, donde coincidió con Torre y con el consejero delegado, Onur Genç.
Por su parte, Salazar, de origen mexicano, preside un consejo que agrupa a las agrupaciones empresariales aztecas más destacadas. En cuanto a Revenga, ha desarrollado 25 años de carrera en el Banco Mundial y, por otro lado, su llegada a BBVA supondrá el cumplimiento del compromiso de alcanzar un 30% de mujeres en el consejo.
Hay que precisar que, junto con estos nombramientos, BBVA solo propone para la reelección a dos de los cinco consejeros que podían ser reelegidos: Susana Rodríguez y Lourdes Maiz. Con este movimiento, Torres marca distancia con la gestión del anterior presidente, Francisco González, y comienza a construir un BBVA a su medida.
En ese sentido, según explica el propio banco a DIRIGENTES, BBVA se desliga de la responsabilidad que se le pueda atribuir en el caso Villarejo. Así, se afirma que “de los hechos investigados no se deriva ninguna responsabilidad para la entidad“. De este posicionamiento se deduce que el banco deja de defender el mandato de González, como había hecho en el pasado.
A pesar de que la entidad “ha trasladado a la causa de forma muy proactiva toda la documentación recopilada de manera interna”, desde el banco se reconoce que “la investigación que prevalece es la de la Audiencia Nacional”, lo que concuerda con las informaciones publicadas en prensa acerca de la validez del informe forensic que realizó BBVA para investigar el asunto.