El seguro defiende los incentivos a los planes de pensiones

“Es imprescindible el mantenimiento de un sistema fiscal favorable para los planes de pensiones”. Así de contundente se ha mostrado la presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos, sobre la posibilidad del nuevo Gobierno de eliminar los beneficios fiscales derivados de los citados productos. El programa con el que Unidas Podemos se presentó a las urnas el pasado 10 de noviembre recogía esta medida entre sus propuestas y aunque aún no se sabe si acabará en papel mojado, por el momento, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ya se encuentra manos a la obra en la elaboración de un informe sobre la eficacia de esta reducción tributaria.

En este sentido, González de Frutos ha defendido la existencia de beneficios fiscales que fomenten el ahorro, ya que “las personas tienen mayor tendencia al consumo” y, por tanto, ve necesario un tratamiento que lo incentive a largo plazo con un objetivo muy claro: permitir “a los mayores de pasado mañana” contar con una renta que les permita seguir consumiendo y mantener el nivel de desarrollo económico del país. “La condición de longevidad justificaría que fueran productos bien tratados desde el punto de vista fiscal”, ha añadido.

Durante la presentación de la evolución del sector asegurador en 2019, González de Frutos también ha avanzado que la patronal se encuentra trabajando en la modificación de la guía de acceso a la hipoteca inversa para que pueda adaptarse a la nueva ley hipotecaria, que entró en vigor hace más de medio año.

Asimismo, ha valorado de manera positiva la formación de un nuevo Gobierno de coalición –“fruto de la evolución de la sociedad”– que acabe con la incertidumbre política, por lo que el desafío pasa por lograr acuerdos a través del consenso.

El sector asegurador echa el freno

La desaceleración económica se ha dejado notar en el sector asegurador. Según los datos provisionales recabados por la Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA), los ingresos por la venta de pólizas en 2019 se situaron en 64.155 millones de euros, un 0,42% menos con respecto al ejercicio anterior. González de Frutos ha comentado que “las evoluciones de los dos grandes componentes de negocio son muy dispares, ya que, si bien el seguro no vida muestra, una tendencia a la expansión, incluso, por encima de la economía, esto no es lo que pasa en el seguro de vida, de forma bastante coherente con la situación, sobre todo, de los tipos de interés”. Así, el grueso del citado importe lo acapara el segmento de no vida con 36.629 millones y un avance del 3,39%, mientras que las provisiones de vida han experimentado un ligero aumento del 3,3%, hasta los 27.526 millones. Sin embargo, este último importe cambia al analizar la cifra de negocio de vida en ingresos por primas, que desciende un 5,06%.

La bajada de la venta de automóviles también se ha visto reflejada en una menor contratación de este tipo de coberturas, cuyo volumen de negocio ha registrado un ligero incremento del 1,52%, “muy lejos de la subida del 3% de años anteriores” y en línea con la evolución de la demanda del parque de vehículos”. Esta bajada se ha visto compensada por el repunte de los seguros relacionados con el ámbito de la salud que han despegado un 4,77%, hasta los 8.923 millones de euros. Un crecimiento que también va en línea con el área de los seguros de inmuebles (+3,96%) en el que se incluyen viviendas, comercios, industrias o comunidades de vecinos. En cualquier caso, vehículos continúa siendo la rama de actividad que más dinero reporta al ramo de no vida con 11.307 millones. Con estos datos, González de Frutos ha insistido en que el reto del sector pasa ahora por la búsqueda de nuevos productos y ofertas en un “escenario complicado” y de bajos tipos de interés.