Tras meses de especulaciones el grupo inversor LetterOne, propiedad del millonario ruso Mijaíl Fridman, ha comunicado su intención de adquirir el 100% del capital de Dia. La cadena de alimentación ha sufrido diferentes reveses en los últimos meses, como la caída en bolsa, la reducción de los beneficios esperados, así como la salida del selectivo español Ibex 35.

Todos los pasos han servido como preparación para que Fridman se decidiera a tomar el control de la empresa. El hecho previo fue la retirada de dos de sus consejeros de confianza de la cúpula de Dia, hecho que en su momento se justificó por la pretensión de diseñar y desarrollar un “eventual plan de sostenibilidad a largo plazo”.

La apuesta de Fridman es la siguiente: ofrece 0,67 euros por acción cuando al cierre de mercado de este lunes la acción se pagaba a 0,43 euros, por lo que la prima que se derivaría de la compra se estima en un 56,1%. En otras palabras, si los titulares de las acciones se decidieran a vender, LetterOne necesitaría 296 millones de euros para acometer la compra.

En todo caso, esa oferta se realiza teniendo en cuenta que Dia no distribuirá dividendos ni ninguna clase de retribución a los accionistas, aunque si así fuera se descontaría esa cantidad de la oferta que realiza Fridman.

Desde el punto de vista de LetterOne, Dia se encuentra en “serias dificultades financieras y requiere la implementación de un plan de transformación integral”. Así, para que Dia tenga “una estructura de capital viable a largo plazo”, Letterone propondrá realizar un aumento de 500 millones de euros que “se compromete a respaldar”.

En ese sentido, las críticas del grupo de Fridman van más allá, al explicar que Dia se encuentra “en un declive estructural y su marca se ha deteriorado de manera significativa”. Para hacer frente a ese declive y a lo que el socio director de L1 Retail denomina “un futuro incierto”, Letterone pretende implementar “una nueva estrategia y una solución financiera”.