Los activos dudosos, en gran parte procedentes del negocio inmobiliario, llevan trayendo de cabeza a la banca desde el comienzo de la crisis. Es por ello que continúan tratando de deshacerse de ellos, como ha comunicado Ibercaja Banco hace unas horas. Según ha remitido a la CNMV, Ibercaja Banco ha vendido una cartera de préstamos […]
NacionalDirigentes Digital
| 28 jun 2019
Los activos dudosos, en gran parte procedentes del negocio inmobiliario, llevan trayendo de cabeza a la banca desde el comienzo de la crisis. Es por ello que continúan tratando de deshacerse de ellos, como ha comunicado Ibercaja Banco hace unas horas.
Según ha remitido a la CNMV, Ibercaja Banco ha vendido una cartera de préstamos “en su mayoría dudosos” con un valor nominal de 534 millones de euros a la sociedad MELF Investment Holding II. La venta se ha producido entre inversores de primer orden.
En ese sentido, según comunica la entidad, supone una reducción del 40% del saldo dudoso que corresponde a empresas inmobiliarias y no inmobiliarias con respecto a marzo de 2019.
No obstante, tendrá un impacto negativo en el ebitda del segundo trimestre de este año, en torno a unos 25 millones de euros. Por el contrario, el ratio de solvencia (CET1 Fully Loaded) tendrá “un impacto positivo”.
Así, la entidad calcula que con esta operación el ratio de morosidad en el primer semestre del año se situará en el 5%, en lugar del 6,7% con el que cerró en el primer trimestre. Por otra parte, el ratio de activos improductivos brutos se situará en el 7,2% en el segundo trimestre, frente al 8,8% en el primero.