Formar y seleccionar al mejor talento no es fácil. Además, se acentúa el reto si los profesionales pertenecen al campo de la tecnología que cada vez demanda más perfiles especializados. A medida que avanza la innovación, requiere de más personas formadas en tecnologías disruptivas que impulsen con su trabajo la competitividad de la empresa y la capacidad de esta para adaptarse a nuevos procesos. Según el último informe Tecnologías digitales en la empresa del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), el 17% de pymes tiene especialistas TIC en plantilla, aunque en las grandes empresas el porcentaje asciende a un 65,9%.

Elisa Barnett, Head of Talent Operations de Prosperity Digital, agencia de recruitment líder en contratación de perfiles digitales, cuenta que las compañías están comenzando a incorporar talento digital a medida que lo necesitan: “Muchas empresas están en pleno proceso de transformación digital, así que el porcentaje va creciendo a medida que más compañías pasan por este proceso”, y añade: “Es esperable que en algunos sectores haya pymes que no necesiten estos perfiles en plantilla, pero muchas pequeñas empresas tienen que actualizarse para ser competitivas, y las medianas y grandes empresas, sin duda”.

A día de hoy los perfiles más demandados por las compañías son los relacionados con marketing digital, SEO, PPC (encargados de gestionar campañas de pago en Google Ads, Facebook Ads, etc), analistas de datos, product owners, diseñadores UX/ UI, eCommerce Manager, además de todo tipo de programadores.

Soft skills y hard skills

Para formar a estos profesionales y mantenerlos actualizados en un contexto de constante cambio, “lo importante es que los programas se centren no tanto en herramientas concretas (ya que estas van cambiando constantemente y se pueden aprender con el uso), si no en aprendizajes de calidad de soft skills (habilidades personales, sociales y emocionales) y hard skills (habilidades específicas) básicas”, señala Elisa Barnett. También es fundamental en este ámbito el conocimiento de idiomas como el inglés o nociones de programación, que son de gran utilidad para el desarrollo de tareas.

Actualmente el gran reto es la adecuación en un mundo cambiante. La Head of Talent Operations de Prosperity Digital indica que “es bastante complicado adaptar la formación a la tendencia del momento ya que, una vez te hayas adaptado, habrá aparecido otra nueva. Así que creo que tiene sentido intentar trabajar fundamentos que permitan a la persona evolucionar, más que enseñar constantemente herramientas concretas”.

En cuanto a las estrategias a seguir para que empresas y estudiantes de estas disciplinas puedan encontrarse y trabajar con un interés común, los profesionales recomiendan recurrir a prácticas en entornos reales de trabajo además de la formación en otras habilidades como el trabajo en equipo. De esta manera es más fácil poner en práctica los conocimientos adquiridos y dar el salto al mundo empresarial. Desde Prosperity Digital explican que las organizaciones pueden ofrecer programas de prácticas en colaboración con universidades, y así formar a personas sin experiencia para luego contratarlas: “El modelo de formación dual creo que tiene más sentido en la realidad actual, y ayudaría a los jóvenes a relacionarse con la realidad laboral antes y a las empresas a descubrir talento anticipadamente”.

El desafío de cubrir 23.000 vacantes

El reto al que se enfrenta hoy el sector tech es cubrir las 23.000 vacantes que siguen libres debido a que la demanda de perfiles está creciendo a un ritmo mucho más rápido que el número de personas formadas y con experiencia. Elisa Barnett cuenta que en su día a día conviven con este desafío: “Es algo que vemos constantemente en Prosperity Digital, empresas que no encuentran a perfiles digitales adecuados simplemente porque no hay suficientes”. Hay que tener en cuenta que el proceso de transformación digital al que se enfrentan muchas compañías actualmente requiere de diversos especialistas experimentados que lideren y gestionen los procesos. Por eso, Barnett opina que “nuestra sociedad está apenas empezando la transformación digital, y en consecuencia este desequilibrio continuará hasta que madure el ecosistema”.

Las empresas deben tener bien definido qué buscan exactamente a la hora de seleccionar un perfil específico. Por otro lado, es fundamental contar con una buena descripción del puesto de trabajo que sea atractiva para los candidatos y ofrecer condiciones de empleo competitivas en lo que respecta al sueldo y a la flexibilidad para trabajar de forma híbrida o en remoto. Además, es vital que las compañías ofrezcan oportunidades de crecimiento y formación para el talento joven. Por último, Elisa Barnett subraya que “el branding de la empresa, así como la presentación de su producto o proyecto empresarial, también es importante para atraer a candidatos que pueden escoger entre varias empresas cual les resulta más interesante”.