Hay dos tendencias claras que atañen a los consumidores y a los propios negocios. La primera, es que la población tiende a llevar menos dinero encima. La segunda es que, por consiguiente, las empresas facilitan el pago con todo tipo de medios electrónicos. Los datos confirman esta percepción que se extiende también a los gastos […]
PYMESDirigentes Digital
| 03 dic 2021
Hay dos tendencias claras que atañen a los consumidores y a los propios negocios. La primera, es que la población tiende a llevar menos dinero encima. La segunda es que, por consiguiente, las empresas facilitan el pago con todo tipo de medios electrónicos.
Los datos confirman esta percepción que se extiende también a los gastos de las empresas. Las pymes españolas usan sus propias tarjetas para contratar distintos servicios. Tanto es así que el 83% de estas empresas tienen una tarjeta para realizar compras y pagar gastos de los empleados, según el último barómetro de Mastercard España.
Esta cifra es 20 puntos porcentuales mayor que la de 2019, cuando solo seis de cada diez negocios tenía tarjeta para estos fines. No obstante, la pandemia ha incidido en el tipo de tarjetas que se usan para estos gastos, dado que el 30% que usa tarjeta prepago ha aumentado sus gastos. Por el contrario, se registra un descenso de los gastos en el 31% de las pymes que usan tarjetas de débito y el 25% en el caso de las de crédito.
¿Qué hay más allá de esta gestión de los gastos? ¿Cómo pueden aumentar sus ventas las pymes? Las cifras del estudio de Mastercard muestran otra evidencia: el pago con tarjeta incrementa la cuantía de los pagos en comparación con las compras en efectivo. En concreto, el importe medio de las compras con tarjeta asciende a los 290 euros de media, frente a los 194 euros de las compras en efectivo.
Por eso, resulta imprescindible contar con TPV, con el evidente impulso que puede aportar para compras de mayor importe. De hecho, esta necesidad no se queda ahí y sigue evolucionando hacia el pago sin contacto.
Los pagos contactless están importante un auge importante, por lo que los negocios se muestran más proclives a facilitarlos. El 83% de las empresas admiten el pago sin contacto, ya sea con tarjeta o a través del móvil. Durante los últimos cuatro años, el aumento ha sido notable, puesto que en 2017 la aceptación de este tipo de pagos ascendía al 62% de los negocios. Y además, hay que decir que el 94% de los negocios utiliza este método de pago todos los días.
Este cambio de hábitos de los consumidores también afecta a la forma de comprar. El comercio electrónico representa así una alternativa para los negocios de aumentar sus ventas y ofrecer sus productos y servicios a un público global.
La prueba de que los negocios han captado este mensaje es que uno de cada cuatro (26%) ya cuentan con TPV virtual, los terminales que se usan para procesar los pagos online. Mientras, en 2019 apenas los tenían uno de cada diez (12%). Los sectores que más han adoptado este sistema son la educación y la sanidad, donde tres de cada cinco empresas tienen un TPV virtual.