Los resultados trimestrales que ha presentado Apple reflejan el difícil momento que está atravesando la tecnológica y marcan un punto de inflexión en su fortaleza financiera. Por primera vez en más de una década, Apple ha registrado una caída en el último trimestre del año tanto de los beneficios como de la facturación, reflejo del […]
Resultados empresarialesDirigentes Digital
| 30 ene 2019
Los resultados trimestrales que ha presentado Apple reflejan el difícil momento que está atravesando la tecnológica y marcan un punto de inflexión en su fortaleza financiera.
Por primera vez en más de una década, Apple ha registrado una caída en el último trimestre del año tanto de los beneficios como de la facturación, reflejo del desgaste del iPhone, su teléfono estrella y el gran motor de su negocio. Entre septiembre y diciembre, un periodo que se presupone de fuertes ventas por la temporada navideña, la tecnológica ha registrado una bajada de la facturación del 4,5%, hasta 84.310 millones de dólares. El beneficio se redujo hasta 19.965 millones de dólares, un 0,4% menos.
El iPhone y China explican la debilidad de las cuentas de Apple en la recta final de 2018, equivalente al primer trimestre de su ejercicio fiscal. Los ingresos de su teléfono estrella han pasado de 61.100 millones de dólares en el mismo periodo de 2017 a menos de 52.000 millones de dólares, es decir, un descenso del 15%. El iPhone sigue representando, aún así, más del 60% de los ingresos del Apple.
Por primera vez, la compañía no ha hecho públicas las ventas de sus dispositivos por unidades, lo que hubiera permitido analizar mejor el recorrido del iPhone, sin tener en cuenta la subida de precios aplicada.
El desplome en China, que ha registrado el menor crecimiento del PIB de los últimos veinte años, ha sido aún mayor. El gigante asiático ha pasado de a aportar al negocio 13.169 millones de dólares, un 26,6% menos que hace un año. La actividad cae en todos los grandes mercados de Apple, excepto en su principal, Estados Unidos, donde la facturación se eleva casi un 5%, hasta casi 37.000 millones de dólares.
El resto de grandes dispositivos de Apple, como el Mac y el iPad, suben ligeramente los ingresos, pero el motor de crecimiento se encuentra en la filial de servicios. Esta división, que agrupa Apple Music y la AppStore, ha pasado a facturar 10.875 millones de dólares, un 19% más.
Las perspectivas para el resto del ejercicio no son muy optimistas. Apple calcula una facturación de entre 55.000 y 59.000 millones de dólares, con un beneficio operativo de hasta 8.600 millones de dólares, por debajo de las expectativas de los analistas.