El sector bancario ha entrado en una nueva fase y, a juicio del CEO de Intesa Sanpaolo, Carlo Messina, ésta requiere de “mayores dimensiones, una mayor capacidad de inversión y la adopción de un nuevo modelo de financiación sostenible”. De ahí que la entidad de este paso al frente al plantear una oferta sobre UBI […]
Bolsas
| 18 feb 2020
El sector bancario ha entrado en una nueva fase y, a juicio del CEO de Intesa Sanpaolo, Carlo Messina, ésta requiere de “mayores dimensiones, una mayor capacidad de inversión y la adopción de un nuevo modelo de financiación sostenible”. De ahí que la entidad de este paso al frente al plantear una oferta sobre UBI Banca que implica un canje de 17 acciones nuevas suyas por cada 10 de UBI Banca, lo que supone una valoración de unos 4.900 millones de euros. La prima que se plantea es del entorno del 22%, un hueco que se cubre esta jornada en bolsa con la subida que experimentan las acciones de la entidad que recibe la propuesta.
Según los responsable de Intesa Sanpaolo, la entidad resultante contará con un motante de préstamos de cerca de 460.000 millones de euros, con unos 21.000 millones en ingresos, mientras que el ahorro depositado en el banco conjunto por parte de los italianos asciende a 1,1 billones de euros.
Intesa Sanpaolo ha seleccionado a UBI Banca de entre todo el espectro financiero del país para plantear una operación corporativa porque “es sin duda el mejor administrado en términos de calidad presupuestaria y compromiso con la economía real y la sostenibilidad”, destacan desde el banco.
Objetivos como entidad conjunta
Entre los objetivos que se marcan como banco unido estaría el de “lograr un beneficio neto de más de 6.000 millones de euros en 2022”, también el de remunerar a los accionistas con un dividendo elevado y sostenible: se espera que alcance los 0.2 euros para 2020 y que supere esa cantidad el año siguiente.
Además, entre los objetivos también está “acelerar la reducción de préstamos morosos sin costes para los accionistas” o firmar un índice de capital común esperado superior al 13%. Además, también se ponen como meta “garantizar 30.000 millones de euros de crédito adicional en los próximos 3 años para apoyar la economía italiana” o aumentar los “nuevos desembolsos para la economía verde de 50.000 a 60.000 millones y aumentar el límite máximo para las inversiones en la economía circular de 5.000 a 6.000 millones”.
