En su segundo gran discurso en el mismo número de semanas, Trump aseguró que libraría una batalla de múltiples frentes "militar, cibernética y financiera" para vencer al grupo militante, aunque no dejó claro cómo podría diferenciarse de lo que ha hecho el Gobierno del presidente Barack Obama.

"Trabajaremos estrechamente con la OTAN en esta misión", afirmó Trump, cuyas declaraciones sobre la Organización del Tratado del Atlántico Norte a principios del verano boreal generaron duras críticas de sus aliados e incluso dentro de algunos de sus seguidores en el Partido Republicano.

Pero lo que denominó el nuevo enfoque adoptado por la organización para la lucha contra el terrorismo lo llevó a cambiar de opinión y ya no considera que la OTAN está "obsoleta". Aparentemente, Trump se refería a reportes de que la alianza busca mejorar el intercambio de información.

La OTAN ha estado luchando como alianza contra el terrorismo por más de una década después de los ataques del 11 de septiembre del 2001 en Estados Unidos. Trump llamó a bloquear el acceso a Internet y a las redes sociales a quienes estén alineados con Estado Islámico, que domina territorios en Siria e Irak, pero dijo que no quería detallar una estrategia militar porque sería alertar a los enemigos potenciales.

Como presidente, dijo que pedirá al Departamento de Estado y al Departamento de Seguridad Nacional que identifiquen las regiones del mundo que siguen siendo hostiles a Estados Unidos y donde los test habituales podrían no ser suficientes para atrapar a aquellos que representan una amenaza.

The Wall Street Journal dijo en un editorial que Trump debe moderar su campaña dentro de las próximas semanas o renunciar. Haciendo eco de la creciente alarma sobre su candidatura entre muchos líderes republicanos, el periódico opinó que Trump no ha logrado una campaña competente.