Inversión sostenible en España: abrazando lo social en tiempos de crisis climática

Opinión de Alejandro Castañeda, responsable de Formación y Estudios de Spainsif, sobre la inversión sostenible en España.

La inversión sostenible en España ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, como lo demuestra el estudio publicado por Spainsif en octubre del año pasado sobre el estado de la ISR en 2022. El historial de estudios y la elevada muestra de actores encuestados nos permiten desde Spainsif ofrecer una visión profunda de cómo los inversores están abordando el desafío de integrar consideraciones de sostenibilidad en sus decisiones de inversión.

El estudio mencionado revela que, a pesar del crecimiento continuo de la inversión con criterios ASG hasta 2021, 2022 marcó un ligero descenso en el volumen total. Sin embargo, este descenso debe contextualizarse en relación con el declive del mercado en su totalidad, lo que se traslada en un aumento en la cuota de activos gestionados con criterios ASG sobre el total de activos comercializados en España y nos sugiere que la inversión sostenible puede estar demostrando una mayor resiliencia en tiempos de incertidumbre.

Un aspecto notable es la sofisticación creciente de las estrategias de inversión sostenible, afianzándose la estrategia de políticas activas de engagement y voto como la principal estrategia de inversión ASG. Asimismo, destaca que cada vez más entidades aplican un enfoque holístico a la hora de invertir, no centrándose en una sola estrategia, sino aplicando varias a la vez, lo cual es fundamental para maximizar el impacto positivo de la inversión sostenible.

Pasando al plano de en “qué” se invierte, históricamente la atención se ha centrado en gran medida en los aspectos ambientales de los criterios ASG. Si bien, en los últimos tiempos, especialmente a raíz del COVID-19 y los conflictos geopolíticos, ha incrementado el peso de la dimensión social en la inversión sostenible. Se han puesto de relieve las desigualdades existentes en nuestras sociedades y se ha comenzado a prestar más atención a prácticas laborales justas, al respeto por los derechos humanos y otros aspectos sociales en las decisiones de inversión. Sin embargo, mientras la dimensión social se fortalece, no podemos perder de vista la urgencia de abordar la crisis climática. Los desarrollos normativos a nivel europeo y las iniciativas, tanto públicas como privadas, en torno a los objetivos del Acuerdo de París han situado la financiación de la transición hacia una economía baja en carbono como uno de los principales pilares de la inversión ASG.

Del estudio también se desprende una visión optimista del futuro de la inversión sostenible en España. Las percepciones positivas del mercado, junto con el impulso regulatorio en materia de finanzas sostenibles y la creciente conciencia de los riesgos y oportunidades asociados con la sostenibilidad, sugieren que estamos en el camino hacia una transformación más profunda y duradera en el mundo de las finanzas.

En conclusión, la inversión sostenible en España está experimentando una evolución significativa, con un enfoque creciente en aspectos sociales y una mayor atención a la financiación de la transición hacia una economía baja en carbono. Si bien existen desafíos por delante, la creciente sofisticación de las estrategias de inversión sostenible y la creciente interoperabilidad entre la regulación y los estándares internacionales ofrecen esperanza para un futuro más sostenible y equitativo.

2024-04-01 09:32:42
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