El nuevo año viene cargado de nuevos propósitos y objetivos por cumplir. Uno de los más repetidos en todas las sobremesas durante estas navidades es el mismo: realizar actividades al aire libre y viajar, viajar mucho. La Senda de los Mil Colores, aúna estos dos deseos. Situada entre los municipios de Cepeda y Madroñal -pertenecientes […]
Dirigentes Digital
| 16 ene 2023
El nuevo año viene cargado de nuevos propósitos y objetivos por cumplir. Uno de los más repetidos en todas las sobremesas durante estas navidades es el mismo: realizar actividades al aire libre y viajar, viajar mucho. La Senda de los Mil Colores, aúna estos dos deseos. Situada entre los municipios de Cepeda y Madroñal -pertenecientes a la Mancomunidad de la Sierra de Francia- es una ruta perfecta para los amantes de las actividades al aire libre y de la naturaleza.
La Senda de los Mil Colores se trata de una ruta de cuento situada en el Parque Natural de Las Batuecas en la provincia de Salamanca, que en cada estación del año brilla con luz propia y refleja a través de sus paisajes y recorridos imágenes, patrones y colores, miles de colores que proporcionan una experiencia única. Es una senda fabulosa para hacer solo, en familia, en pareja, con amigos, andando o incluso en bicicleta y especialmente recomendable con buen tiempo y un día despejado.
La Senda de los Mil Colores transcurre por un sendero tradicional, con pista forestal y agrícola. Tiene aproximadamente 10 kilómetros y puede realizarse en unas cuatro horas. Es de dificultad baja, para todas las edades, incluso para realizar con niños. Todo el itinerario se encuentra señalizado con marcas en amarillo y blanco (sendero de pequeño recorrido, PRCSA-20) ya que la dirección del Parque Natural pretende favorecer el conocimiento del entorno paisajístico y cultural de esta zona.
Durante la ruta atravesarás caminos serpenteantes, bosques de encina y robledales y restos de antiguos molinos y construcciones del pasado. Es una actividad única, en un enclave incomparable y apta para los amantes de la naturaleza y también de la historia. En el recorrido, podrás encontrarte desde un espectacular puente medieval, el Puente de la Dehesa, que atraviesa el Arroyo del Coso, hasta maravillas naturales como un frondoso bosque donde encontrarás castaños, madroños, avellanos, acebos, robles… un sinfín de árboles típicos de esta privilegiada zona natural. Una mezcla de sensaciones, estampas e imágenes que precisan de la calma necesaria para disfrutar y apreciar la belleza de estos parajes.
Al ser una ruta circular, se puede empezar a explorar por cualquiera de los dos pueblos. Si empiezas por Cepeda, un pueblo que brilla por sus tradicionales construcciones serranas levantadas sobre un castro prerromano, encontrarás su inicio ubicado en la fuente romántica que está en plena circunvalación, en la carretera C-512 en dirección a Sotoserrano. Cepeda se encuentra en la ladera de un monte de la Sierra de Francia y cuenta con cerca de 550 habitantes.
Durante el primer paseo por Cepeda nos llamará la atención las siempre vistosas casas de la comarca con sus líneas de madera perfectamente dispuestas a lo largo de las fachadas. También es singular la Avenida de los Reyes Católicos que desemboca en la Ermita del Humilladero y el Antiguo Colegio.
Por otra parte, si prefieres, puedes comenzar la ruta por Madroñal. El nombre de este municipio proviene del madroño, sin embargo, es el cerezo el que se ha convertido en seña de identidad de Madroñal. Al sur de Madroñal encontramos fincas agrícolas con árboles frutales, prados y tierras de labranza. Es una zona especialmente colorida cuando llega la primavera. Un poco más abajo, situaremos el bosque multicolor que nos lleva a Cepeda de la Sierra. La arboleda está salpicada de robles, castaños, madroños, acebos y alcornoques, siendo otoño su plenitud paisajística.
Esta ruta, aparte de atraer personas fanáticas de la naturaleza, da a conocer la belleza de estos dos pueblos de Sierra de Francia y también su cultura, patrimonio, tradiciones y gastronomía ampliando su estancia más allá del fin de semana.
El fuego está completamente prohibido y tampoco podrás verter ni líquidos ni sólidos que puedan contaminar el lugar. Tampoco puedes lavar ni en ríos ni en fuentes. Tienes que tratar de mantener el parque completamente limpio, así como “La Senda de los Mil Colores”. Debes respetar al máximo, la fauna y la flora durante el camino, la geología y las construcciones que encuentres. Además, debes tener en cuenta que el ruido también es una forma de contaminar. Mantén un comportamiento tranquilo y céntrate en disfrutar de todo lo que nos ofrece la naturaleza y los paisajes que se generan.
La acampada libre no está permitida, por lo que si quieres pasar algún día en la zona tendrás que visitar los campings o alojamientos de la zona. Existe una variada oferta de alojamientos rurales en Cepeda, Madroñal y pueblos de alrededor. Se puede consultar en www.salamancaemocion.es