Después de haber sido considerado en abril el mejor gestor sanitario de la pandemia en Sudamérica, Uruguay ensaya ahora quedarse con el título de líder en la reactivación económica en la pospandemia. Reabriendo los centros comerciales desde el 9 de junio bajo estrictos protocolos de seguridad y con un plan de promoción para inversiones extranjeras, […]
InternacionalDirigentes Digital
| 17 jun 2020
Después de haber sido considerado en abril el mejor gestor sanitario de la pandemia en Sudamérica, Uruguay ensaya ahora quedarse con el título de líder en la reactivación económica en la pospandemia.
Reabriendo los centros comerciales desde el 9 de junio bajo estrictos protocolos de seguridad y con un plan de promoción para inversiones extranjeras, el país de 3,5 millones de habitantes informó, hasta este miércoles (17), un total de 24 víctimas fatales por covid, el número más bajo de la región.
Al mismo tiempo, es la economía que tendrá la menor caída de su PIB en 2020 en la región: -3,7 %, según la proyección más reciente del Banco Mundial (BM), que estima para sus vecinos Argentina y Brasil una contracción de 7,3 % y 8%, respectivamente, y un impacto regional más pronunciado que el de las recesiones de 2008 y de la década de 1980.
De a poco y seguro
El país pasó a ser un atractivo para personas y capitales extranjeros en un momento en que la región se convirtió en epicentro global de coronavirus y escenario de una recesión de grandes magnitudes. Gobernado desde marzo por Luis Lacalle Pou (centro), viene de 12 años de una gestión de izquierda moderada y sin una transición traumática.
Sociedad igualitaria, alto ingreso per cápita, bajos niveles de pobreza y la clase media más grande de América (más del 60% de su población), son algunas de las características que enumera el BM en su presentación del país, en el que observa, además, una alta “confianza de los ciudadanos en el Gobierno”.
En ese contexto, un decreto presidencial estableció, desde el viernes (12), un régimen que reduce a 380.000 dólares la inversión necesaria para considerar una radicación de intereses económicos (antes era de casi 2 millones) y a 1,6 millones para empresas que generen a partir de 15 puestos de trabajo.
País de oportunidades
“Uruguay es un país de puertas abiertas, con una política migratoria que otorga un marco de seguridad pública, jurídica y económica para todas las personas extranjeras que deseen radicarse”, dijo Lacalle Pou al respecto, calificando al suyo como un “país de oportunidades”.
Unas 200 empresas argentinas, la mayoría del sector de tecnología, ya iniciaron el trámite para radicarse allí en sintonía con el clima social y económico de Uruguay, referido en varias ocasiones, inclusive por el presidente Alberto Fernández, como un “modelo” a seguir.
En cuanto a la reapertura del comercio, la medida significa que vuelven a funcionar en la capital Montevideo unos 1.400 locales responsables de 9.000 empleos directos y 25.000 indirectos. Los próximos serán restaurantes, cines, casinos y áreas de juegos infantiles.