Desde el lunes pasado, los centros logísticos grandes y pequeños de España están siendo testigos de la paralización que ha producido una huelga en el sector del transporte. Tanto los convocantes como los trabajadores y empresas afiliados a otras organizaciones llevan una semana en la anormalidad. Los primeros, porque se niegan a trabajar en las […]
TransporteDirigentes Digital
| 18 mar 2022
Desde el lunes pasado, los centros logísticos grandes y pequeños de España están siendo testigos de la paralización que ha producido una huelga en el sector del transporte. Tanto los convocantes como los trabajadores y empresas afiliados a otras organizaciones llevan una semana en la anormalidad.
Los primeros, porque se niegan a trabajar en las condiciones actuales de subida de precio del combustible. Y los segundos, porque los huelguistas les niegan su derecho a trabajar. En las siguientes líneas, DIRIGENTES trata de responder a las principales incógnitas de este paro que se exitende ya una semana.
Los convocantes de estas movilizaciones se integran dentro de la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera. Tanto la propia patronal (CEOE) como el Gobierno consideran que esta organización es minoritaria y no representa los intereses de la mayoría de los transportistas.
Sin embargo, dicha Plataforma afirma que habla por las medianas y pequeñas empresas de transporte, además de los autónomos, el 85% del sector. Según la asociación UNO Logística, secundan la huelga 130.000 pymes y autónomos.
En un documento del 5 de marzo dirigido a la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, la plataforma pedía prohibir la contratación de servicios por debajo de los costes de explotación. En otras palabras, que se prohíba operar por debajo de los costes.
También se incluyen otras reivindicaciones como:
-La prohibición de que conductores y autónomos carguen y descarguen mercancías con sus propios vehículos.
-Regular los límites en los horarios de carga y descarga.
-Vigilar que las grandes empresas no creen cooperativas que conviertan a los trabajadores en falsos autónomos.
-Eliminar la categoría de ‘operador de transporte’ y utilizar la única calificación como ’empresas de transporte’.
-Retirada de los pagos en autovías y carreteras por parte de las empresas de transporte nacionales.
Las fuentes oficiales niegan que pueda ocurrir, pero hay sectores como el de la alimentación que echan en falta productos lácteos, pescado, frutas y verduras. La industria láctea y la pesca también han manifestado sus dificultades para hacer llegar sus productos a los negocios minoristas.
Las asociaciones de distribución alertan de que se están produciendo problemas en la cadena de suministro, sobre todo por la beligerancia y agresividad de los huelguistas. Por ello, solicitan al Gobierno su colaboración para que puedan llegar los suministros a los supermercados y, a la vez, piden un plan especial para sofocar los problemas de los transportistas.
El Ejecutivo rechaza sentarse a negociar con los transportistas que han convocado este paro porque consideran que se trata de una “organización minoritaria”. En ese sentido, desde el Ministerio de Transportes se están sucediendo reuniones con el Comité Nacional del Transporte por Carretera y otras asociaciones que considera representativas del sector.
Más allá de eso, está poniendo en marcha un dispositivo de cerca de 25.000 efectivos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil para escoltar a los conductores que sí quieran hacer su trabajo.
Desde la Plataforma se llama a realizar un paro indefinido, por lo que se desconoce cuándo puede finalizar esta huelga. La asociación va renovando día a día la convocatoria ante el “abandono” y el “desprecio” del Gobierno.
De ese modo, llamó a los transportistas a manifestarse este pasado sábado en las principales ciudades de España. Se trata de la misma fecha en que se convocaron movilizaciones por parte de un partido político con el que se ha vinculado la huelga de transporte.
