Por Gloria Martínez, Head of Marketing de Payfit España
Gloria Martínez
| 10 jul 2024
La digitalización ha revolucionado el mundo empresarial, modificando no sólo cómo operan las empresas sino también cómo interactúan con sus empleados y clientes. Este cambio ha sido fundamental en el entorno laboral, donde la adopción de tecnologías digitales ha traído consigo numerosos beneficios y retos significativos.
La transformación digital se centra en el uso de tecnologías digitales para crear o mejorar procesos empresariales, culturas y experiencias de cliente para satisfacer las necesidades cambiantes del mercado y la sociedad, abarcando desde la automatización de tareas rutinarias hasta la implementación de sistemas avanzados de gestión de recursos humanos y nóminas. En este escenario, la digitalización ofrece una amplia gama de ventajas para las empresas.
En primer lugar, gracias a la automatización de tareas reducimos el tiempo y los recursos necesarios para realizarlas, lo que permite al personal concentrarse en actividades de mayor valor. Por otro lado, las herramientas digitales proporcionan acceso a datos en tiempo real, facilitando una toma de decisiones más informada y ágil.
Además, no sólo hablamos de beneficios para la entidad, sino también de mejoras en la satisfacción y retención del talento, pues nos permite llevar a cabo una gestión más personalizada y eficiente del mismo, aumentando la comodidad y la voluntad de permanencia. Algo a lo que también contribuye una mayor flexibilidad y una rápida adaptación a los cambios del mercado y demandas del cliente.
Son múltiples los beneficios que la transformación digital presenta ante cualquier organización, sin embargo, hay una serie de obstáculos que continúan impidiendo el pleno desarrollo del proceso en ciertas empresas. Hablamos de la resistencia al cambio como factor fundamental, pues la implementación de nuevas tecnologías puede encontrarse dicha barrera en empresas acostumbradas a métodos más tradicionales.
La seguridad de la información es uno de los mayores desafíos de la digitalización. La gestión de datos sensibles requiere de robustas medidas de seguridad contra el acceso no autorizado y esto puede llegar a ser un gasto significativo para las empresas, pero es necesario. Es más, invertir en tecnología, independientemente de su ámbito de aplicación, requiere de una inversión continuada pero es verdad que generalmente su retorno suele percibirse rápido.
El principal miedo a la hora de adoptar este tipo de herramientas suele estar en aquello de hacer las cosas de manera distinta, pero una vez dado el paso el retorno de la inversión suele ser a corto plazo. Eso sí, no llevar a cabo este tipo de transformación puede llegar a suponer el final de su historia.
Las empresas españolas se encuentran en un momento decisivo en cuanto a la adopción de la digitalización. Muchas ya han iniciado el camino hacia la transformación digital, pero siguen existiendo desafíos signifi cativos. Y es que, si bien es cierto que la pandemia supuso un trampolín del proceso, este no fue del todo uniforme y muchas pymes se enfrentan, a día de hoy, a obstáculos que ralentizan su transición.
No obstante, apostar por la tecnología es una inversión de futuro. De hecho, el 29% de las compañías en España han aumentado sus beneficios con la inversión en inteligencia artificial y en automatización, tres puntos más que a nivel global. Además, según un estudio de Think Digital, se prevé que el 66% de las empresas españolas inicien su transformación digital a lo largo del 2024.
Lo cierto es que la digitalización se ha convertido en una necesidad imperativa para las empresas que aspiran a mantener la competitividad. La transformación digital es capaz de optimizar procesos internos y de mejorar la experiencia del cliente, facilitando la adaptación a los cambios del mercado. En este contexto, identificar las áreas críticas que requieren digitalización es el primer paso para alcanzar el éxito en el proceso.
La transformación digital en los departamentos de ventas y atención al cliente es esencial para satisfacer las expectativas crecientes del consumidor. Mediante la implementación de soluciones tecnológicas avanzadas, las empresas pueden optimizar sus procesos de venta, creando experiencias más ricas y relaciones comerciales más sólidas. Por ende, la digitalización no sólo maximiza las oportunidades de conversión y fidelización sino que también proporciona una ventaja mediante el uso de análisis de datos avanzados.
Por su parte, la digitalización del departamento de Recursos Humanos y nóminas es fundamental, pues gracias a la digitalización y automatización de la gestión de nóminas, los departamentos de Recursos Humanos pueden ahorrar hasta el 80% del tiempo en dicha tarea. En primer lugar, porque la automatización de procesos manuales reduce significativamente el margen de error humano, lo que asegura una mayor transparencia y confianza entre empleados y empleadores. Además, esta transformación facilita una gestión más ágil y accesible de los datos de los empleados, permitiendo un seguimiento detallado de sus ausencias, vacaciones y registros de tiempo de trabajo en tiempo real. Además, al digitalizar y automatizar este tipo de procesos, los responsables de estas áreas pueden dedicarle más tiempo de calidad a algo fundamental para todas las empresas: los empleados.
Si ponemos el foco en el área de marketing, la necesidad de reinvención continua en este campo exige que los profesionales del sector se mantengan en un estado de aprendizaje y experimentación permanente. Esto obliga a las marcas a adaptarse rápidamente, adoptando estrategias innovadoras que creen conexiones significativas y que ofrezcan experiencias personalizadas capaces de responder a las expectativas de los clientes, estén en el momento que estén.
Por último, el área de finanzas y contabilidad representa el corazón de toda empresa y, por ello, es necesario conocer ‘al dedillo’ y de manera actualizada la situación en la que se encuentran los recursos económicos. Sólo de esta manera se pueden optimizar los procesos y conseguir una correcta toma de decisiones estratégicas. Es incuestionable que al adoptar soluciones digitales, las empresas pueden transformar radicalmente la eficiencia, la precisión y la transparencia de sus operaciones financieras.