Los expertos califican de “continuista” y “agresiva para el mercado” la decisión del BCE

El Banco Central Europeo ha celebrado su última reunión de 2021 anunciando la finalización del PEPP en marzo de 2022, la reinversión de las compras y el aumento APP en 20.000 millones de euros. Un balance que, llegado el tercer mes del próximo año, dará como resultado que el banco central compre activos por un importe un 50% inferior a lo que lo hace actualmente. En cuanto a los tipos de interés, el tipo de interés de las operaciones principales de financiación y los tipos de interés de la facilidad marginal de crédito y de la facilidad de depósito se mantendrán sin cambios en el 0,00%, el 0,25% y el -0,50%, respectivamente.

En un momento en el que la Reserva Federal programa tres subidas de tipos en 2022 y el Banco de Inglaterra ha anunciado una primera subida de 25 puntos básicos, la primera desde 2018, el BCE ha decidido mantenerse ‘dovish’. “En apoyo de su objetivo simétrico de inflación del 2% y en consonancia con su estrategia de política monetaria, el Consejo de Gobierno espera que los tipos de interés oficiales del BCE se mantengan en sus niveles actuales o en niveles más bajos hasta que vea que la inflación alcanza el 2% mucho antes del final de su horizonte de proyección y de forma duradera durante el resto de dicho horizonte”, explicaban en el comunicado de prensa.

Por todo ello, los expertos tildan esta postura de continuista. «A diferencia de otros bancos centrales, el Banco Central Europeo (BCE) se ha mantenido hoy en su línea”, comenta Ulrike Kastens, Economist Europe para DWS. “En un contexto de aumento de la trayectoria prevista para la inflación, esta decisión ha despertado interrogantes”, agrega Kastens. Según el economista de DWS, la reducción de las compras de activos marca un primer paso claro hacia la normalización. Sin embargo, que sea un paso suficientemente grande dependerá, de forma decisiva, de la evolución de la inflación en los próximos meses. “No obstante, es evidente que, a diferencia de la Reserva Federal, el BCE no tiene prisa por comprometerse a salir de su política monetaria ultralaxa”, puntualiza.

Para Pietro Baffico, Economista de abrdn, el BCE “prefirió permitir una mayor flexibilidad en el futuro en lugar de asumir mayores compromisos. Esto puede parecer una postura relativamente agresiva para los inversores, pero, en general, todavía implica un periodo largo antes de una plena normalización. Esto va en línea con nuestra opinión de que el BCE se mantiene en el lado dovish entre los principales bancos centrales, cambiando sus políticas sólo gradualmente y manteniendo la flexibilidad”. 

Hernán Cortés, socio de Olea Gestión y cogestor del fondo Olea Neutral, se muestra más duro con las decisiones del BCE y afirma que es una postura equivocada el no subir los tipos en 2022. «Sorprende tanta prudencia cuando el balance del BCE ha aumentado 4 billones desde marzo 2020, más de lo que creció en la crisis financiera, desde 2008 a 2018, cuando creció 3 billones”, comenta.

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2021-12-16 18:10:26

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