El sector asegurador va a verse afectado por el endurecimiento monetario de los bancos centrales y, en consecuencia, por sus subidas de tipos, fundamentalmente debido a que la la deuda pública es el principal activo en que invierten las entidades aseguradoras.
Así, en un contexto en el que la alta inflación ha obligado a los principales bancos centrales a dejar atrás su política acomodaticia y a poner fin al dinero “gratis”, el Estudio sobre las inversiones de las Entidades Aseguradoras: “Cambio de escenario”, presentado la pasada semana, indica concretamente que, a cierre de 2021, el 72,2% de las inversiones del sector asegurador español se materializan en renta fija un 52,6% en deuda pública (en su mayoría deuda soberana española, con un 42,8%); y un 19,6% en deuda corporativa.
La investigación, elaborada por ICEA en colaboración con Amundi, hace hincapié en que en el entorno acomodaticio de bajos tipos de interés unido al buen comportamiento de los mercados de renta variable estos años, ha provocado un incremento del peso relativo de la renta variable e Instituciones de Inversión Colectiva, pasando de representar el 11,3% en 2016 al 19,3% en 2021.
Las suscripciones a fondos de inversión y a planes de pensiones, dirigidos a renta variable
De esta forma, y tal y como señala el estudio, el año pasado el 45,2% de las suscripciones a fondos de inversión se materializaron en fondos que invierten mayoritariamente en renta variable, al igual que en los planes de pensiones, donde esta representaba el 47,5% de las aportaciones.
Los inmuebles por su parte representan el 3,5% en 2021, estando el 99,3% situados en España.
El impacto de las entidades aseguradoras en las carteras de inversión
En el acto de presentación, ICEA también presentó los resultados de la encuesta sobre la percepción de las entidades aseguradoras españolas sobre el contexto actual y su impacto en la cartera de inversión, fundamentalmente teniendo en cuenta la incertidumbre de los mercados.
Así, los datos ponen de manifiesto que la guerra en Ucrania ha generado pesimismo sobre la economía, donde un 66,2% de las entidades encuestadas tiene en la actualidad una percepción desfavorable respecto a la Eurozona en los próximos 6 meses, frente a solo un 13% antes de la invasión.
Además, el 41,0% de las entidades encuestadas ha realizado o tiene previsto realizar plusvalías, en su mayoría en renta variable y fondos de inversión, y, en menor medida, en renta fija.
De hecho, y siempre según el informe, el 50% de las entidades declaran que el entorno actual ha provocado que modifiquen su política de inversión para el corto/medio plazo, destacando la reducción de las duraciones en renta fija, la reducción de la exposición a renta variable (favoreciendo el value frente al growth), aumento de la liquidez, incremento del peso de inversiones con mejor calificación crediticia, reducción del crédito, incremento del Real Estate e inversión oportunista en deuda pública española e italiana.
Fuente: ICEA – Amundi
Fuente: ICEA – Amundi
“Los inversores deberían seguir siendo cautelosos”, según Amundi
Por otro lado, las entidades consideran que las áreas geográficas con mayor potencial para realizar inversiones son Estados Unidos y la Eurozona, y que los activos más interesantes para hacer frente a la situación actual son las infraestructuras, renta variable, value, real estate alternativo core y core+, alternativos ilíquidos y los bonos flotantes y ligados a la inflación.
En este evento, Víctor de la Morena, Director de Inversión de Amundi Iberia, presentó, por su parte, las perspectivas económicas de Amundi marcadas por los elevados niveles de fragmentación y una nueva combinación de políticas monetarias y fiscales.
“Los inversores deberían seguir siendo cautelosos en cuanto a la asignación de riesgos y buscar resiliencia y fuentes de rendimientos reales positivos, al mismo tiempo que intentar beneficiarse de las discrepancias entre regiones y sectores a raíz de la desincronización de los ciclos económicos”, concretaba el experto.
2022-06-23 16:56:41