La Fed ha finalizado la última reunión del año subiendo los tipos en 50 p.b., lejos de las anteriores subidas de 75 p.b. "El Comité anticipa que los continuos incrementos en el rango objetivo serán apropiados para alcanzar una orientación de la política monetaria lo suficientemente restrictiva como para devolver la inflación al 2% a […]
La Fed ha finalizado la última reunión del año subiendo los tipos en 50 p.b., lejos de las anteriores subidas de 75 p.b. "El Comité anticipa que los continuos incrementos en el rango objetivo serán apropiados para alcanzar una orientación de la política monetaria lo suficientemente restrictiva como para devolver la inflación al 2% a lo largo del tiempo", asegura la Fed en su comunicado de prensa.
Lo cierto es que la decisión no ha sorprendido al mercado, que ya descontaban esta subida por parte del banco central americano. En líneas generales, el FOMC ha cumplido las expectativas previstas al reducir el ritmo de subidas de tipos a 50 puntos básicos, al tiempo que aumentaba el tipo final previsto con respecto a sus previsiones anteriores. Su determinación de subir los tipos para hacer frente a los riesgos inflacionistas podría interpretarse como una inclinación a favor de la política monetaria, "pero es probable que refleje la reciente relajación de las condiciones financieras y demuestre así su determinación de controlar la inflación a su debido tiempo. La variable clave a partir de aquí será cómo se mantiene el crecimiento ante un mayor endurecimiento", afirma Charles Diebel, director de Renta fija de Mediolanum International Funds Limited (MIFL).
Después de la reunión de diciembre, el mercado espera nuevas subidas hasta que los tipos se sitúen en el entorno del 5% con respecto al 4% actual. Sin embargo, los aumentos podrían ser mayores ya que Jerome Powell, presidente de la Fed, se ha refirmado en combatir la inflación hasta dejarla en el entorno del 2%.
"Nuestro enfoque ahora está realmente en llevar nuestra postura de política monetaria a una que sea lo suficientemente restrictiva como para asegurar un retorno de la inflación a nuestro objetivo del 2% en el tiempo, no es sobre recortes de tasas", afirmó en la conferencia posterior a la reunión.
Este giro hawkish también se refleja en la actualización del Resumen de Proyecciones Económicas. Los miembros del FOMC se muestran dispuestos a subir los tipos aún más en 2023 de lo que ya indicaron en la reunión de septiembre, hasta el 5,1% desde el 4,6%, y parece que ahora están dispuestos a pagar un precio más alto para controlar la inflación. "El crecimiento en 2023 bajó al 0,5% (cuarto trimestre) desde el 1,2% de las previsiones de septiembre de la Reserva Federal. Esto no implica necesariamente una recesión, pero, dependiendo de la trayectoria que tome la economía, ésta podría estar en el horizonte, dado que se prevé un crecimiento bajo", afirma Christian Scherrmann, U.S. Economist para DWS.