Los espacios de coworking son uno de los mayores ejemplos del proceso cambio en el entorno laboral que se han producido en el siglo XXI. Miles de empresas de todo el mundo desarrollan ya sus tareas en este tipo de emplazamientos. Un ambiente moderno, lejos de la institucionalización de las típicas oficinas corporativas, y un […]
Dirigentes Digital
| 13 mar 2018
Los espacios de coworking son uno de los mayores ejemplos del proceso cambio en el entorno laboral que se han producido en el siglo XXI. Miles de empresas de todo el mundo desarrollan ya sus tareas en este tipo de emplazamientos. Un ambiente moderno, lejos de la institucionalización de las típicas oficinas corporativas, y un abaratamiento de los costes que favorece especialmente a las start-ups son las claves de un modelo de negocio que ha llegado para quedarse. Una de las empresas que están apostando con más fuerza por el mercado es Spaces. Nacida en Amsterdam, la compañía cuenta ya con edificios en Madrid y Barcelona, pero sus planes son mucho mayores: quieren llegar a todas las principales capitales de provincia de España en un plazo de cinco años. Hablamos con su country manger, Philippe Jiménez, para conocer más sobre este tipo de espacios y el boom que están provocando. ¿Cómo es el modelo Spaces?? En principio podría parecer que nuestro mercado está en las start-ups y en el sector de la innovación. Es así en parte, aunque es mucho más amplio. Ofrecemos una serie de características en cuanto a diseño e infraestructuras que es adecuado para ellas. Es barato y se amolda perfectamente. A diferencia de otro tipo de empresas, en Spaces ayudamos a crear una comunidad. Hay muchísimas empresas que gracias a la relación que se genera en nuestros espacios comparten ideas y crean juntas. Otro aspecto muy importante es que la start-up no está sola. ¿Cómo lo conseguimos? A través de programas de animación: charlas, talleres o conferencias; todo esto ayuda a mejorar la interrelación entre las empresas. Y además, gracias a zonas de ocio con mesas de ping-pong, billar o futbolín también se acentúa esa cercanía. Ofrecemos un entorno en el que gracias a un diseño y unas facilidades extraordinarias las empresas puedan focalizarse en hacer su trabajo en un medio ambiente que fomenta la creatividad y la innovación. Otra de las características de Spaces es su enfoque millenial. Sí, sabemos que a los millenials no les interesa trabajar entre cuatro paredes dentro de entornos inflexibles e incómodos. Quieren contacto con los demás. Pero no son solo ellos. Nos dimos cuenta hace tiempo que las grandes multinacionales cada vez están más atraídas por este modelo de negocio. ¿Por qué? Porque saben que la innovación viene de las start-ups y no quieren perder este tren. Al contrario de lo que mucha gente piensa no son las grandes empresas las que innovan, sino las pequeñas. Por eso las multinacionales quieren estar junto a ellas para poder acceder más fácilmente a este talento. Ahora en Spaces tenemos tanto start-ups como empresas internacionales porque creemos que es la mezcla más productiva y beneficiosa para ambas. ¿Cómo se gestiona esta interrelación entre las grandes corporaciones y las start-ups? Ya hay muchas empresas internacionales que tienen sus oficinas dentro de Spaces, al igual que pueden estar las start-ups. Hay empresas que pueden tener 100 trabajadores y otras 3, pero todas se benefician de poder interactuar dentro del mismo entorno. Creamos animaciones de todo tipo para fomentar esta cercanía: desde clases de pilates o yoga a, como decía antes, charlas y conferencias para que los proyectos innovadores tengan su escaparate. Estas relaciones no son como eran antes: no consisten en dejar una tarjeta de visita; lo que se hace es hablar directamente. Una vez que hay esa relación personal cualquier charla profesional es más sencilla. Spaces ya está presente en Madrid y Barcelona. ¿Piensan llegar a otras ciudades? Sí, este año tenemos planeada la apertura de más centros en Madrid y Barcelona, además de uno en Valencia. Queremos crear espacios en las mayores capitales de provincia de España. Estamos buscando edificios, pero necesitamos que reúnan una serie de características que no es fácil encontrar. Aunque esperamos ir encontrando lugares que sean propicios para desarrollar nuestra actividad. ¿En qué plazos tienen planificado ir entrando en estas otras capitales de provincia? En un plazo muy corto. Esperamos llegar pronto a Bilbao, Murcia, Alicante, La Coruña, Valladolid, León y muchos otros lugares bastante pronto. La decisión para ir entrando en estas ciudades está tomada; solo nos falta ir encontrando los edificios adecuados. De aquí a cinco años queremos tener presencia en todas las capitales de provincia de España. ¿Cree que el modelo de espacios coworking va a seguir creciendo a costa de las oficinas de empresa que han sido lo standard en las últimas décadas? Totalmente. La transición desde las oficinas tradicionales hacia los espacios flexibles ya es una realidad pero va a crecer mucho más aún. El mercado y la tecnología dictan las reglas del juego. Y demandan estos entornos de trabajo modernos. Hoy con el portátil, la tablet o el móvil ya es posible trabajar desde cualquier lado. Esto fomenta que los puestos de trabajo ya no sean estáticos. Es algo estructural; ya no hay vuelta atrás. Quienes utilizan espacios flexibles ya no quieren volver al modelo tradicional. Hay una nueva economía digitalizada que está cambiando nuestra forma de trabajar. Esto está ejerciendo un impacto muy poderoso en el tipo de espacio de trabajo que se demanda. Hay una verdadera revolución cultural respecto al espacio de trabajo. ¿Este tipo de espacios están destinado fundamentalmente a start-ups de carácter tecnológico o también existe demanda en otro tipo de sectores? Las start-ups son importantes porque ofrecemos una serie de características que son muy útiles para su desarrollo. Pero no solo para ellas. A Spaces están llegando empresas de todo tipo: farmaceúticas, de consumo, de servicios… y también pymes y freelances. El mercado de trabajo ha evolucionado y Spaces ofrece a casi cualquier modelo de negocio los medios que necesita.