En un momento como el que estamos, donde aunque las vacunas hayan hecho su aparición la contagiosa variante ómicron no ha pasado desapercibida y los picos de contagios se han disparado, conviene saber dónde se encuentra nuestro país en materia económica. Sin embargo, y pese a que este 2021 nuestro PIB y economía se han […]
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| 20 dic 2021
En un momento como el que estamos, donde aunque las vacunas hayan hecho su aparición la contagiosa variante ómicron no ha pasado desapercibida y los picos de contagios se han disparado, conviene saber dónde se encuentra nuestro país en materia económica.
Así lo indica Almudena Benedit, responsable de gestión de carteras para Iberia del banco privado suizo Julius Baer, que señala que, “aunque históricamente la renta variable española suele tener una rentabilidad relativa superior en entornos de subidas de tipos, esta vez preferimos otros mercados como el italiano”.
La experta indica que espera que la economía española se beneficie de la demanda acumulada y no satisfecha durante la pandemia y de un efecto base favorable en el año que entre, y adjunta que “es probable que la contribución del sector exterior al crecimiento siga siendo débil en el corto plazo, ya que el turismo, que representa aproximadamente el 12,5% del PIB, tardará más de lo esperado en alcanzar los niveles prepandemia dada la propagación de nuevas variantes. Considerando la escasa contribución del sector externo, no creemos que la economía española alcance niveles prepandémicos hasta el tercer trimestre de 2022”.
A medio y largo plazo, la entendida habla de que la mayoría de los actores financieros dan por hecho que la economía española se verá respaldada por la totalidad de los fondos de recuperación que la UE le ha asignado, siendo uno de los mayores beneficiarios, concretamente 69.500 millones de euros en 2021-2026.
Además, entre sus detalles la experta indica que uno de los principales riesgos de cara a 2022 es la polarización política española, pues podría poner en peligro la recepción de los fondos europeos y su uso eficaz.
“Respecto al PIB esperado, creemos que el crecimiento de este año será del 4,4% y del 5,1% en 2022”, insiste la gestora.
“En cuanto a la exposición regional, la renta variable española está sobrexpuesta a América Latina (19% de las ventas) y, por tanto, se ve muy afectada por la evolución de esa región, que últimamente ha empeorado y que se está viendo sobre todo afectada por la subida de precios en la alimentación”, matiza.
Así, y tal como se indicaba, la hoja de ruta del Ibex “se encuentra entre los peores índices en términos de crecimiento esperado de los beneficios, cerca del mínimo histórico en términos relativos” para la gestora.
Y adjunta a continuación: “Debilidad absoluta, volumen muy bajo y la sensación de existir un coste de oportunidad cada vez más alto en caso de asignar recursos a este indicador. Perder los 8250 puntos abrirá el camino hacia los 7800, no existiendo soporte intermedio relevante que, fruto del pánico que se apoderará de los pocos inversores que quedan activos, hará caer esa zona en muy pocas sesiones. Si se produce el milagro, rebote hasta la zona de los 8600 donde se encuentra el verdadero muro a superar”.
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