El actual contexto de tipos sigue representando el principal obstáculo para los bancos por mantener la rentabilidad. Han sido varias las ocasiones en las que José Sevilla, consejero delegado de Bankia, ha tenido que lidiar con preguntas acerca de este tema en la rueda de prensa de presentación de resultados del primer semestre del año. […]
NacionalDirigentes Digital
| 29 jul 2019
El actual contexto de tipos sigue representando el principal obstáculo para los bancos por mantener la rentabilidad. Han sido varias las ocasiones en las que José Sevilla, consejero delegado de Bankia, ha tenido que lidiar con preguntas acerca de este tema en la rueda de prensa de presentación de resultados del primer semestre del año.
Preguntado por este medio, Sevilla se ha mostrado claro: “Incorporaremos nuevas medidas para paliar el efecto de los tipos en negativo”. No obstante, ha dejado la puerta abierta a la naturaleza de esas medidas, dado que es una decisión que tendrá que tomarse a finales de año.
Lo que sí ha descartado es que se vayan a cobrar comisiones o intereses a los clientes minoristas del banco. En todo caso, reflexiona sobre la conveniencia de los tipos de interés actuales, que “penalizan la rentabilidad de la banca”. Sevilla ha explicado que los tipos de interés bajos son una medida buena “e incluso deseable” que además han conseguido “relanzar la economía europea”, si bien reconoce que en el caso de los tipos en negativo deberían ser temporales.
Por otra parte, Bankia enfrenta un problema que no tiene su competencia, el de tener que privatizarse por completo antes de que finalice 2021. El obstáculo es doble, dado el pobre desempeño bursátil de la banca en los últimos tiempos. Sevilla confía en que Bankia sea una entidad privada a medio plazo y en que haya oportunidades para hacer alguna gran colocación de capital antes de que finalice ese plazo.
REDUCCIÓN DE LOS BENEFICIOS EN 2020
El conjunto de factores que afectan a Bankia han obligado a su consejero delegado a rebajar las expectativas establecidas en el Plan Estratégico. “No vamos a llegar a lo 1.300 millones de beneficios el año que viene”, ha explicado rotundo Sevilla. Al igual que con las medidas para paliar los tipos negativos, Sevilla pospone hasta final de año la concreción de esa previsión de beneficios.
Lo mismo ocurre con el dividendo. El dirigente de Bankia apuesta porque su entidad podrá mantener los compromisos de reparto de beneficios, sin utilizar la variante del ‘scrip dividend’ o dividendo en acciones, que se ha popularizado en otras entidades.
Por otro lado, Sevilla no cree que vaya a producirse ninguna operación de fusión. Según ha dicho, esta posibilidad está descartada “durante la duración del Plan Estratégico”, que se extiende hasta 2020.