El sol ha vuelto a brillar este verano de formas diferentes en toda España. También en materia turística porque se ha producido una clara mejora frente a 2019, el nivel a comparar antes de la pandemia. De hecho, son varios los factores positivos que nos han mostrado que la recuperación del sector está en marcha.

Entre ellos los niveles de ocupación hotelera en agosto en nuestro país, que a la espera de cifras concretas y con los regionales en la mano, constatan el aumento de turistas y de las reservas de hoteles, restaurantes y de otras formas de viajar.

Desde la primera cadena de hoteles de España, Meliá Hotels, arguyen que su ocupación ha alcanzado cifras del 60%, una mejora sustancial, con precios muy similares a los que había preCovid-19, en 2019. En especial, con buena evolución en la costa española y hasta un 70% de las reservas de última hora, las que se producen menos de tres semanas antes de la llegada al destino.

EL NUEVO TURISMO EN ESPAÑA

Este verano ha servido para constatar un cambio sustancial en el sector turístico. Y es que el turismo nacional ha sido el gran precursor de la mejora, a pesar de que estábamos en el Top3 del sector a nivel global, solo por detrás de Francia y EEUU, por número de viajeros internacionales que nos visitan. Su ausencia ha crecido un 124% en julio en cualquier alojamiento en España que no sea la casa de un amigo.

Y por supuesto, para comprobarlo por doble vía solo hemos de mirar al gasto de los turistas extranjeros en España. Su nivel diario no se reduce en cuantía, gastan 144 euros frente a los 160 de antes de la crisis pandémica, pero sí se sustancia en lo global: La diferencia se duplica con creces, de los 5.231 millones de este año gastados en julio a los casi 12.000 de 2019. Este es el verdadero exponente de la recuperación turística en España, el dinero que se dejan, mucho más importante que la cantidad de viajeros que nos llegan.

La quinta ola, la variante Delta y la incidencia en España a comienzos de verano con la vacunación masiva en ciernes, elevaron las restricciones y las reticencias de muchos turistas foráneos que han elegido nuevos destinos, considerados más seguros, para sus vacaciones. De ahí que el salvavidas haya sido el turismo nacional, que mejoraba un 10,7% con más de 8,6 millones de viajeros que han pernoctado en albergues, campings, apartamentos y hoteles.

EL CAMINO QUE QUEDA POR RECORRER

Pero todavía estamos en los albores de la recuperación, porque el total de turistas, sean de casa o de fuera, que han pernoctado en España, ha bajado en julio un 22,6%. Queda mucho camino por recorrer y en muchos casos, será distinto al anterior. Por ejemplo, los viajeros han utilizado un 20,6% menos el hotel y un 21,5% los apartamentos, frente a las cifras de 2019, las anteriores al Covid-19. De hecho, no solo se reduce la estancia en hoteles sino también el nivel de estancias, casi un 39% inferiores. Mientras, el turismo rural apenas ha notado un ligero descenso en el séptimo mes del ejercicio.

El precio, este verano, ha cobrado importancia, si tenemos en cuenta que las pernoctaciones en campings y albergues se han elevado y mucho. En el primer caso rozan el 6% de subida en los datos prepandemia, mientras que en el segundo la subida es exponencial: del 125%.

EL FUTURO DEL SECTOR

Los niveles de ocupación hotelera deben pasar del 60% al 80% habitual e incluso alcanzar en algunos casos el 100% perdido durante la crisis. Ahora toca prolongar el verano hasta octubre, si el tiempo acompaña en esta campaña, y en el futuro, recuperar a los viajeros que han buscado otros destinos.

Otra asignatura pendiente, que se constara en invierno, serán los destinos de ciudad, muy castigados en verano, de los que se espera mucho en la parte final del año con su temporada alta. La recuperación de los vuelos transoceánicos con EEUU, fallidos este verano, es otro de los asuntos a resolver.

El optimismo llega además de las contrataciones en el sector. Según un informe de Manpower, la hostelería, con un 58% de expectativa de creación de empleo neto, es el sector mejor posicionado para recuperar puestos de trabajo antes de que acabe el año, con un 54% de los directivos de nuestro país dispuestos a ampliar sus plantillas en estos próximos meses.

Ya solo falta la vuelta de británicos, alemanes, franceses, chinos y estadounidenses, entre otros, para que disfruten de España.

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