Cuando se habla de Revolución Industrial se piensa en la máquina de vapor yen el auge de la producción de manufacturas de finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX. También se tienen en mente otros desarrollos de finales del siglo pasado, como puede ser la aparición de los ordenadores o máquinas que permitían […]
NacionalDirigentes Digital
| 31 jul 2019
Cuando se habla de Revolución Industrial se piensa en la máquina de vapor yen el auge de la producción de manufacturas de finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX. También se tienen en mente otros desarrollos de finales del siglo pasado, como puede ser la aparición de los ordenadores o máquinas que permitían automatizar la producción.
Entre esos avances suele obviarse el cambio que ha supuesto la expansión y democratización de los vehículos a motor. El incremento de las opciones de transporte “ha aportado grandes ventajas en cuanto a libertad de desplazamientos”, explican en RACE. No obstante, el desarrollo incontrolado de la movilidad ha llegado a resultar “especialmente preocupante”, añaden sobre todo en las zonas urbanas, donde el vehículo privado ocupa más espacio que cualquiera de sus alternativas.
Se hace notar que el concepto de transporte ha hecho un rápido tránsito hasta el de la movilidad, que abarca un campo más amplio que lo que supone tener un coche para ir al trabajo y a un tercer sitio de forma eventual. Desde la Universitat Oberta de Catalunya, el profesor Miguel Mayorga cree la transformación de los últimos años ha significado que “hablar del modelo de movilidad es, en definitiva, hablar del modelo de ciudad”.
Como explicaba Pierre Jean Coulon, del Comité Económico y Social Europeo (CESE), es preciso que se facilite el cambio hacia las nuevas formas de movilidad, como son los vehículos de uso compartido y los eléctricos.
Asimismo, Coulon señalaba recientemente en un foro sobre movilidad que en ese proceso es imprescindible que las personas cambien sus hábitos, desde una mentalidad individual a una colectiva. Coulon explicó que “la energía limpia y la movilidad son el futuro de Europa”.
En ese contexto, las empresas han observado un mercado próspero. De esa forma se posicionan los créditos sostenibles de Bankia. La entidad ha lanzado préstamos en condiciones especiales para adquirir productos que tengan como principio fundamental el respeto al medio ambiente o, dicho de otro modo la financiación de “productos sostenibles”.
Entre los productos por los que Bankia podría proporcionar un crédito se encuentran los vehículos híbridos, los eléctricos, y también los que estén propulsados con combustibles alternativos que tengan unas emisiones reducidas.
Dicha financiación cuenta entre sus principales condiciones que no contempla con comisión de apertura y facilita un plazo de hasta 96 meses (ocho años) por una cantidad máxima de hasta 60.000 euros. En cuanto al tipo de interés, el TIN anual se establece en el 4,75% fijo durante toda la vida del préstamo, mientras que sise presta atención al TAE, está fijado en el 4,85%. De ese modo, para un préstamo de 12.000 euros con un plazo de 60 meses, la cuota mensual asciende a 225,09 euros, por lo que el pago acumulado se elevaría a 13.504,94 euros, lo que supone unos intereses de 1.504,94 euros.
Además de los créditos sostenibles, la rama del renting ha adquirido una gran relevancia. Entre las ventajas se encuentra el establecimiento de una cuota fija mensual; el precio, ya que resulta más económico que la compra de un vehículo, que además se deprecia; y la disponibilidad de un abanico de servicios que acompañan al propio coche.
En ese sentido, Bankia aporta un valor añadido más allá del vehículo. Los servicios engloban el mantenimiento preventivo y correctivo, seguro a todo riesgo sin franquicia con prima fija, la sustitución ilimitada de neumáticos, incluyendo pinchazos y reventones, así como un vehículo de sustitución hasta 15 días por cada inmovilización en las reparaciones de chapa y pintura.
Junto a esos servicios, Bankia añade un servicio de asistencia en carretera desde el kilómetro cero y un servicio de atención al cliente, disponibles a cualquier hora y cualquier día del año. Por otro lado, el servicio de renting incorpora la gestión de multas en vía administrativa, y se hace cargo de los impuestos inherentes a la matriculación y tenencia, además de los propios gastos de matriculación y entrega.
La oferta de vehículos trata de atender las necesidades diversas de los usuarios de este servicio. Por ello el renting de Bankia incluye diferentes vehículos como son el Volkswagen Golf, el KIA Niro, el Nissan Micra N-Connecta, el BMWX1 sDrive18d o, en la gama de vehículos industriales, el Opel Combo Life Expression. De ese modo la variedad se extiende a los modelos y también a los precios, que van desde los 252,01 euros al mes del Nissan Micra, hasta los 474,03 euros al mes del BMW X1.