La 48º edición del Foro de Davos (WEF, por sus siglas en inglés) arranca este martes liderado por primera vez, exclusivamente por mujeres. Se trata de un hecho histórico que responde a las fuertes críticas que ha recibido la organización ante la escasa participación femenina en encuentros anteriores y que, además, persigue empoderar a este […]
Dirigentes Digital
| 23 ene 2018
La 48º edición del Foro de Davos (WEF, por sus siglas en inglés) arranca este martes liderado por primera vez, exclusivamente por mujeres. Se trata de un hecho histórico que responde a las fuertes críticas que ha recibido la organización ante la escasa participación femenina en encuentros anteriores y que, además, persigue empoderar a este colectivo ante la brecha salarial existente entre ambos sexos y de la que ha advertido en reiteradas ocasiones a través de la publicación de varios informes. Bajo el lema “Creando un futuro compartido en un mundo fracturado”, siete son las mujeres que lideran este encuentro anual. La ministra noruega Erna Solberg, la directora gerente del Foro Económico Mundial, Christine Lagarde, la secretaria general de la Confederación Sindical Internacional, Sharan Burrow, la directora general de la Organización Europea de Investigación Nuclear (CERN), Fabiola Gianotti, Isabelle Kocher, consejera delegada de Engie Group y la fundadora y presidenta de Mann Deshi Foundation, Chetna Sinha. Si bien se trata de un avance en la lucha por conseguir una mayor igualdad, la representación femenida aún es escasa: solo un 21% del total de participantes, la cifra más alta registrada hasta la fecha. En concreto, de las 630 mujeres que se han trasladado a la ciudad suiza estos días, la mayoría (213) proceden de EE. UU., Reino Unido (65), Suiza (46), Alemania (25), China (23). Y solo cuatro son españolas, entre las que destaca la presidenta de Banco Santander, Ana Botín, o la consejera delegada del grupo Iberostar, Gloria Fluxá. Sin embargo, un estudio publicado por Statista muestra que, a pesar de que el número de mujeres norteamericanas sea muy superior al del resto de países, esta cifra representa menos de un tercio del total de asistentes procedentes de dicho país, mientras que en Kenia o Perú, por ejemplo, esta proporción asciende al 40%. El último estudio sobre el Índice Global de disparidad de género, que el WEF elabora anualmente desde 2006, arroja que la disparidad entre hombres y mujeres se había incrementado en el último año, pasando de ser 83 los años que tardaría en alcanzarse a los 100 de media en todo el mundo. Además, añadía que si se lograra superar este fenómeno eso aumentaría en 204.000 millones de euros el PIB de Reino Unido, 1.430.000 millones de euros en EE. UU., 450.000 millones de euros en Japón, 261.000 millones en Francia, principalmente. En términos porcentuales, la diferencia salarial alcanza el 23% a nivel global. Unos datos nada despreciables si se tiene en cuenta que la desigualdad ocupa un lugar prioritario en las agendas de todos los Gobiernos.