La NRS es una iniciativa global de comercio e inversiones lanzada desde China y respaldada actualmente por setenta países del mundo. Según estimaciones del propio gobierno, China tiene previsto importar bienes, desde los países adheridos a la iniciativa NRS, valorados en 10 billones de dólares hasta 2020. Y las inversiones dentro del ámbito NRS, según estas mismas […]
Dirigentes Digital
| 26 feb 2018
La NRS es una iniciativa global de comercio e inversiones lanzada desde China y respaldada actualmente por setenta países del mundo. Según estimaciones del propio gobierno, China tiene previsto importar bienes, desde los países adheridos a la iniciativa NRS, valorados en 10 billones de dólares hasta 2020. Y las inversiones dentro del ámbito NRS, según estas mismas previsiones, pueden acabar superando el medio billón.
Panamá es, formalmente, la puerta de acceso para China en América Latina. Las multinacionales chinas desean expandir su influencia comercial, con base en Panamá, por toda la región del Caribe y Sudamérica. Pero también existe interés chino en sectores estratégicos del país centroamericano como, por ejemplo, las energías renovables. China, líder mundial en energía eólica o fotovoltaica, sabe que Panamá desea tener tres terceras partes del pastel energético total dedicado a las renovables antes de 2050.
En tratamiento de aguas, o los programas dedicados a la vivienda social, China también espera tener una participación importante. El gigante asiático pueden aportar maquinaria e inversiones en la modernización del sector agrícola de Panamá. Un sector, el primario, que suma el 18% del empleo total. Y, como segundo usuario mundial del Canal de Panamá, China busca consolidar sus operaciones logísticas. Por un lado, potenciando las zonas francas, como Colón, donde solamente la teleco china, Huawei, tiene invertidos cuarenta millones de euros en varios almacenes. Y, por otro lado, desarrollando otros negocios como turismo, servicios educativos o sanitarios, además de nuevas inversiones en I+D.
Todo esto, por lo demás, también va a generar oportunidades en otras industrias como los servicios de naturaleza financiera, especialmente seguros derivados del comercio marítimo. América Latina ha superado recientemente a Europa como el primer destino mundial de las inversiones chinas tras Asia. Panamá, al haber reestablecido relaciones diplomáticas con China el año pasado, ahora prevee recibir mucha inversión china de golpe. En Marzo, Air China operará dos vuelos semanales hasta Ciudad de Panamá, con lo que se espera un alza significativa del turismo. Panamá, con apenas cuatro millones de habitantes, se postula como un hub perfecto, para China, en América Latina. Ahora la pregunta es si España va a ser capaz, o no, de aprovechar esta irrupción del gigante asiático en LATAM.