WS rebota un 3% en una semana marcada por la reducción de aranceles de China

Entre los datos económicos publicados, destaca la tasa de desempleo del mes de enero que subió ligeramente al 3,6% desde el 3,5% anterior. La economía de Estados Unidos agregó 225.000 empleos en enero, mientras continúa el ritmo sorprendentemente fuerte de contratación. El crecimiento del número de trabajadores en las industrias de construcción, atención médica, transporte y almacenamiento fue particularmente fuerte en enero, según el informe de la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos.

Esta semana también destacó que la actividad industrial de Estados Unidos se recuperó inesperadamente en enero, superando las estimaciones de consenso, después de contraerse durante cinco meses consecutivos. El índice del ISM subió a 50.9 puntos, superando las estimaciones de consenso que estaban en 48.5. Cualquier lectura de más de 50 denota crecimiento. La disminución de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China ha provocado un repunte en el sentimiento empresarial. “Parece probable que el acuerdo comercial de fase uno con China haya generado un impulso positivo para el sector al dar cierta certeza de que no habrá más aranceles, al menos en el corto plazo», opina James Knightley, economista internacional en jefe de ING. “La encuesta ISM apunta a que 2020 probablemente sea un mejor año para los fabricantes estadounidenses”, según Andrew Hunter, economista senior de Capital Economics.

Aún así Goldman Sachs indicó que el crecimiento global de 2020 sentirá un impacto moderado por el brote de coronavirus. Para el banco, el crecimiento del PIB global promedio anual en 2020 se reducirá en 0,1 a 0,2%. 

Entre otros datos importantes publicados en los últimos días el del déficit comercial del país que se redujo en 2019 por primera vez en seis años precisamente debido a la guerra comercial de la Casa Blanca con Pekín. El informe del Departamento de Comercio también indicó la disminución en el flujo de mercancías el año pasado, y que las exportaciones registraron su primer descenso desde 2016. La caída del 1,3% en las exportaciones fue liderada por la disminución en los envíos de bienes de capital, suministros y materiales industriales y otros bienes.

Las importaciones de bienes cayeron un 1,7% el año pasado, también la primera disminución en tres años. Estados Unidos importó 2.400 millones de barriles de petróleo crudo, el menor desde 1992, ya que el país redujo significativamente su dependencia del petróleo extranjero debido al aumento en la producción y la exploración de crudo. También importó menos capital y otros bienes. El Departamento de Comercio también comunicaba que gasto en construcción disminuyó un 0.2% en enero, la primera caída desde junio. Y los inventarios mayoristas de diciembre en EE.UU. fueron un poco más débiles de lo estimado inicialmente en medio de un amplio descenso en las existencias, incluidos los vehículos de motor.

Reducción de aranceles por parte de China y coronavirus

Otro de los motivos que hizo que los principales selectivos de Wall Street acabaran con datos positivos fue la decisión de China de reducir a la mitad los aranceles sobre más de 1.700 productos estadounidenses. Según el Ministerio de Finanzas del país asiático, entrarán en vigor el 14 de febrero y en concreto las tasas se reducirán del 10% al 5%, y del 5% al 2,5% en los productos que forman parte de los 75.000 millones de bienes afectados por los aranceles chinos que entraron en vigor el 1 de septiembre de 2019.

Además, se produjo la intervención del banco central de China para calmar los nervios de los inversores respecto a las consecuencias del coronavirus que ha provocado que muchos proveedores y otras compañías logísticas de China hayan parado dos semanas toda la actividad. 

De hecho Qualcomm, el mayor fabricante mundial de chips y módems para teléfonos inteligentes ha advertido que el virus de Wuhan podría afectar la industria móvil mundial. “Existe una incertidumbre significativa sobre el impacto del virus en la demanda de dispositivos y la cadena de suministro”, dijo el director financiero de la compañía, Akash Palkhiwala. «Es probable que la industria de los teléfonos inteligentes, que depende enormemente de China tanto para la fabricación como para las ventas, reciba un gran golpe”, continuaba Palkhiwala. Casi la mitad de los ingresos de Qualcomm el año pasado provinieron de China, y varios de sus clientes, incluido Apple, tienen una importante presencia en China.

Trump, protagonista de la semana

A parte del coronavirus, que sigue sumando fallecidos y afectando a la economía global, el protagonista de la semana fue Donald Trump, por distintos motivos. Primero porque fue absuelto de los dos cargos que se le acusaban en su juicio político (abuso de poder y obstrucción al Congreso). 

Y segundo porque dio su discurso anual del Estado de la Unión donde destacó sus logros económicos y muchos le vieron haciendo campaña para las próximas elecciones de noviembre. Trump dijo que “han restaurado la posición de la nación en el mundo”. “Estados Unidos está más fuerte que nunca y estamos avanzando a un ritmo que era inimaginable hace poco tiempo, ¡y nunca, nunca volveremos atrás!”. Entre esos éxitos, destacó las cifras de desempleo: “en 3 años, 3 millones y medio de personas en edad laboral se han sumado a la fuerza de trabajo del país”, dijo. Además habló del sector manufacturero del que expresó que va por muy buen camino gracias a que “las compañías están volviendo a Estados Unidos”, y de la confianza del consumidor ha subido a niveles récords. Se otorgó como propia la buena racha de los mercados: “Wall Street sube porque la gente cree que lo hacemos bien”, decía. También alardeó de que Estados Unidos se ha convertido en “el productor número uno de gas y petróleo del mundo”. Por supuesto no se olvidó de los pactos comerciales. Presumió del nuevo acuerdo comercial con China del que dijo que así se pondrá fin a la práctica del país asiático de aprovecharse de Estados Unidos durante años. Y promocionó también el tratado de libre comercio revisado de Norteamérica con México y Canadá que “conducirá a un nivel mucho mayor de equidad y reciprocidad”, expresó el mandatario.

Resultados empresariales 

Entre las empresas que publicaron resultados se encuentra Alphabet. En el cuarto trimestre la empresa matriz de Google tuvo unos ingresos de 46.080 millones, un poco por debajo de las estimaciones. Se trata de la menor subida registrada desde 2015. Destaca Youtube, cuyos anuncios generaron 15.150 millones en 2019. Y el negocio en la nube de Google que originó 8.920 millones en ingresos el año pasado.

Las ganancias de Twitter sufrieron un desplome en el último trimestre pese a que el crecimiento en ingresos superó las expectativas. En concreto, ha registrado ingresos de 1.010 millones el último trimestre, superando las estimaciones. Es la primera vez que supera esa cifra de los mil millones, que representa un aumento del 11% respecto al mismo periodo del año anterior. Las ventas totales por publicidad fueron de 885 millones, un alza interanual del 12%. Esto llevó a que sus acciones subieran más de un 9% en los futuros de Wall Street. El número de nuevos usuarios superó lo esperado. 

Otra tecnológica que no ha alcanzado las expectativas ha sido Snap y por ello bajaban más de un 10% al incumplir los pronósticos con sus ingresos. Las ganancias de la plataforma de comunicación durante el último trimestre del año pasado alcanzaron los 561 millones de dólares. Sin embargo los usuarios activos diariamente, aumentaron un 17% hasta los 218 millones. 

Peor le fue a General Motors que consiguió un beneficio neto atribuido de 6.732 millones de dólares en 2019, un 15,9% menos que en el ejercicio anterior. La larga huelga de los trabajadores de la compañía ha lastrado estos resultados. 

Otra compañía de automóviles, Ford, ha presentado un pronóstico de 2020 más débil de lo esperado y sus acciones caían un 9,5%. En el cuarto trimestre de 2019, Ford reportó una pérdida neta de 1.700 millones, comparado con una pérdida de 100 millones un año antes. Los ingresos del trimestre cayeron un 5% hasta los 39.700 millones de dólares, por encima de los 36.500 millones que el consenso esperaba. Después de las débiles perspectivas para este año, el viernes la empresa nombró al alto ejecutivo Jim Farley como su director de operaciones, posicionándolo como el posible heredero del director ejecutivo Jim Hackett.

El valor de mercado de Exxon se ha derrumbado en 184.000 millones desde su máximo de 2014, o el 41% de su valor. La revolución del esquisto hace que haya exceso de petróleo y gas, tanto que los precios han bajado. El sector de energía del S&P 500 fue fácilmente el mayor perdedor en la última década, generando un rendimiento total de solo el 34%, según Refinitiv. En 2008, cuando los precios del petróleo aumentaron por encima de los 140 dólares por barril y ahora se sitúan entre los 50 y 60 dólares. 

Quizás la empresa de la que más se ha hablado durante la semana ha sido la de automóviles eléctricos Tesla. Sus acciones el lunes se disparaban más de un 20% para alcanzar la marca de los 940 dólares, duplicando así el valor de mercado de la compañía desde el comienzo del año. Desde enero Tesla ha subido un 114% en Wall Street. Pero la alegría de los inversores y del CEO de la empresa, Elon Musk, se desvanecían dos días después cuando las acciones caían un 17%. Y todo después de que el vicepresidente de Tesla, Tao Lin, dijera que las entregas esperadas a principios de febrero desde la planta de la compañía en Shanghai se retrasarían porque debido al coronavirus la fábrica ha permanecido cerrada desde el Nuevo Año Lunar chino. La compañía entregó sus primeros autos Model 3 fabricados en Shanghai al público chino a principios de enero. “Nos pondremos al día con la línea de producción una vez que la situación del brote mejore», agregó Lin. 

Uber, la compañía de transporte de pasajeros, informó que perdió 1.100 millones en los últimos tres meses de 2019. Y en todo el año pasado se dejó 8.500 millones de dólares. A pesar de las malas cifras, el viernes las acciones de Uber subieron después de que la compañía presentara un ambicioso plan para ser rentable a finales de 2020, un año antes de su objetivo anterior. De esta manera quiere acabar con las dudas de Wall Street sobre su viabilidad a largo plazo.

Previsiones

Entre los datos más destacados que conoceremos en los próximos días está el del IPC de enero que podría pasar, según las estimaciones, del 0,2% al 0,1%. También se publicarán las ventas minoristas de enero, que si no hay una sorpresa podrían quedarse como están en el 0,3% y la producción manufacturera del mes pasado que está en el 0,2%.

2020-02-07 12:59:00

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