Invertir en oro, según Invesco

¿Por qué el oro es tan valioso?

A lo largo de la historia, el oro ha sido una de las materias primas más codiciadas y, en la actualidad, puede tener un papel importante en las carteras de algunos inversores. El valor monetario de este metal precioso se reconoce desde hace mucho tiempo, utilizado por las primeras civilizaciones para comerciar con bienes y servicios, y adquiriendo posteriormente un carácter más oficial, al ser convertido en monedas. Más tarde, como respaldo de muchas divisas del mundo.

Aunque en 1971, año en que el presidente Nixon cortó el vínculo entre el oro y el dólar, se puso fin de manera oficial a los últimos restos del «patrón oro», ha seguido siendo un metal valioso, muchas veces muy codiciado.

En 2023, teniendo en cuenta las tensiones políticas a escala mundial, las diversas amenazas económicas y la creciente preocupación por el sector bancario, creemos que el papel del oro podría adquirir ahora incluso más importancia que antes.

Demanda del oro

Curiosamente, la atracción por el oro ha alcanzado su máximo nivel en distintas épocas.
En primer lugar, cabe señalar su importancia cultural en gran parte de Asia. La joyería, especialmente en India y China, representa cerca de la mitad de la demanda anual de oro. Las aplicaciones tecnológicas constituyen alrededor de un 8% de la demanda, y el resto puede dividirse entre demanda de los bancos centrales y de inversión.

Si bien la demanda de los sectores de la joyería y tecnológico es relativamente constante, las otras fuentes de demanda suelen variar de un año a otros, y los picos suelen presentarse cuando existe miedo a lo desconocido. Los bancos centrales han sido compradores netos de oro en todos y cada uno de los últimos 13 años, si bien se alcanzó un récord en 2022, ya que se adquirieron 1.135 toneladas, un 24% de la demanda total del oro. Los bancos centrales, especialmente en los mercados emergentes, han comprado oro para diversificar sus reservas y como protección frente a la incertidumbre geopolítica.

Los inversores individuales pueden utilizar el oro por las mismas razones que las instituciones y los bancos centrales. El concepto básico de la diversificación es la combinación de distintos activos en una cartera o, de manera más precisa, activos que tienden a comportarse de manera distinta entre sí.

Según esta lógica, cabría pensar que el beneficio de añadir, por ejemplo, bonos corporativos a una cartera de renta variable sería limitado, ya que estos activos suelen moverse en la misma dirección cuando se dan determinadas condiciones. Los bonos high yield pueden tener una correlación más elevada con las acciones, lo que significa que también pueden moverse en la misma dirección al estar a merced de los mismos factores, como, por ejemplo, las condiciones económicas predominantes y el apetito por el riesgo de los inversores. Sin embargo, si un inversor desea diversificar su cartera podría considerar activos alternativos, como el oro.

El oro suele comportarse de manera diferente a los activos tradicionales, como las acciones y los bonos. También podría servir de cobertura en épocas de gran volatilidad e incertidumbre a nivel mundial, como las registradas al comienzo de la pandemia, con la invasión a Ucrania por parte de Rusia y, más recientemente, con el hundimiento de Silvergate, Silicon Valley Bank, así como Credit Suisse.

Estos últimos sucesos han reavivado los recuerdos no tan lejanos de la crisis financiera mundial, cuando el oro también mostró un buen comportamiento después de que muchos inversores evitaran activos de mayor riesgo para apostar por otros que consideraban más seguros, como el oro y la deuda pública. Evidentemente, no existe ningún verdadero refugio de seguridad, ya que toda inversión lleva aparejado cierto nivel de riesgo, y las valoraciones pueden sufrir fuertes fluctuaciones. 

¿Qué condiciona el precio del oro? 

Antes de analizar qué podría ocurrir con el oro a corto plazo es necesario comprender qué condiciona su precio. Entre los factores que influyen en el mismo figuran los tipos de interés, la rentabilidad de los bonos, la inflación, el dólar, la situación económica y la geopolítica. Algunos de estos factores están interconectados, lo que significa que si uno aumenta, los otros también lo harán, y viceversa. Esto suele ocurrir con la inflación, los tipos de interés, la rentabilidad de los bonos y el dólar.

Por otra parte, la preocupación por la geopolítica suele existir con independencia de esos factores. Cuando ciertos factores presionan contra el precio del oro mientras otros lo apuntalan, a menudo todo se reduce a cuál de esas fuerzas los inversores consideran más potente o persistente. 

Los sucesos del año pasado aportaron algunos ejemplos útiles que muestran cómo se ha comportado en oro en determinadas condiciones. Cuando Rusia invadió Ucrania en febrero de 2022, algunos inversores trataron de reducir su riesgo con activos que percibían como posibles "refugios de seguridad", como los bonos del Tesoro estadounidense y el oro, lo que provocó un repunte de los precios. Cuando quedó de manifiesto que el conflicto no se extendería más allá de Ucrania, el precio del oro disminuyó a medida que los inversores comenzaban a sopesar otros factores.

El resto del año, las subidas de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) se situaron en un primer plano. La afirmación inicial de la Fed en 2021 de que la inflación sería "transitoria" resultó ser errónea, ya que los precios al consumo siguieron subiendo hasta alcanzar máximos de 40 años. Esto provocó que la Fed respondiera tarde a la inflación, decidiendo seguir subiendo los tipos de manera agresiva, con el consiguiente repunte de la rentabilidad de los bonos y del valor del dólar.

Debido a que el oro está valorado en dólares, al inversor no profesional le resulta más caro comprar si sus divisas se deprecian frente al billete verde. En 2022 vimos que el repunte de la rentabilidad de los bonos y la apreciación del dólar afectaron muy negativamente al oro, a pesar de las amenazas geopolíticas por parte de Rusia y las crecientes tensiones en China. Como hemos dicho, cuando existen fuerzas rivales, los inversores suelen centrarse en aquella que consideran más potente.

Perspectivas del oro 

Estamos en 2023. Los mercados han comenzado a descontar una fecha prevista para que la Fed deje de subir los tipos de interés y tratan de determinar en qué nivel se situarán cuando finalmente detengan su escalada; es decir, el pico o tipo de interés terminal. No obstante, algunos datos económicos siguen siendo preocupantes, especialmente los de inflación y empleo, lo que dificulta que los inversores puedan predecir con cierta seguridad qué hará la Fed. Cuando se despeje el panorama y los inversores puedan realizar predicciones con mayor confianza, cabe esperar que disminuyan los problemas derivados del ascenso de los tipos, la rentabilidad de los bonos y el dólar.

Las amenazas geopolíticas y económicas en un sentido amplio podrían, en ese caso, pasar a un primer plano, y sería ahí cuando el oro probablemente repuntara. Los informes apuntan a que Rusia está preparando una nueva ofensiva y Occidente parece dispuesto a financiar a Ucrania "todo el tiempo que sea necesario". Y mientras ese conflicto sigue enconado, las tensiones entre China y Occidente, sobre todo, con Estados Unidos, podrían escalar por la situación de Taiwán. ¿Habría alguna represalia? Esto se debe al episodio del globo de vigilancia chino, que todavía sigue presente en las mentes de los norteamericanos y, de hecho, en el resto del mundo que lo observaba desde la distancia. Y por si todo lo anterior no fuera suficiente, estamos viviendo la amenaza potencial del sector bancario, ocurriendo muchas cosas en muy poco tiempo.             

¿Cómo se puede invertir en oro y cuáles son los riesgos? 

En primer lugar, es importante entender que el oro no es un activo exento de riesgo. Su precio puede subir o bajar, igual que cualquier otra inversión. Las personas que deseen invertir en oro tienen varias opciones. Algunas de ellas ofrecen una exposición más efectiva que otras al precio del metal precioso, y todas ellas tienen sus propios riesgos.

Acciones de empresas de minería aurífera. Cuando el precio del oro sube, cabe esperar que la rentabilidad de las empresas de minería aurífera también lo haga, algo que, en teoría, debería favorecer un incremento del precio de sus acciones. Aunque esto ocurre algunas veces, el precio del oro no es el único factor que influye en el precio de las acciones de estas empresas. También entran en juego la eficiencia de los procesos de minería, los costes laborales, los costes de financiación, la ubicación de las minas y los costes de transporte. Debido a estos otros factores, la inversión en acciones de empresas de minería aurífera podría ser una manera menos efectiva de adquirir exposición al precio real del oro.

Lingotes y monedas de oro. Comprar y mantener oro físico podría ofrecer una exposición más precisa al precio del oro en comparación con la inversión en acciones de empresas auríferas. Sin embargo, los inversores que elijan este método deben ocuparse de buscar dónde van a comprar las monedas y los lingotes, además de atender los trámites del transporte, el almacenamiento y los seguros. Debido a estos otros costes y al trabajo adicional que conlleva esta opción, puede que a algunos inversores les resulte menos interesante. 

ETC de oro físico. Los ETC (materias primas cotizadas) de oro pueden ofrecer a los inversores una vía sencilla y eficiente para adquirir exposición al precio del oro. Los ETC de oro están respaldados por oro físico, lo que significa que el ETC comparará y mantendrá lingotes de oro (almacenados en bóvedas de banco de alta seguridad) equivalentes al valor total del ETC. Dado que el ETC se ocupa de todos los trámites más pesados, los inversores no tienen que preocuparse por el abastecimiento, el transporte, el almacenaje o los seguros de los lingotes de oro. Las participaciones en ETC de oro físico se pueden comprar y vender a lo largo del día como si se trataran de acciones ordinarias o valores de bolsa. Los precios vienen determinados por un índice de referencia estándar, como el LBMA Gold Price. 

Conclusión 

Si está buscando la manera de diversificar su cartera, puede que le convenga estudiar la posibilidad de invertir en oro, ya sea a través de un ETC de oro físico o mediante otras opciones. Algunos factores que influyen en el precio del oro difieren de aquellos que afectan a activos más tradicionales, como las acciones y los bonos, por lo que el metal precioso puede resultar un elemento de diversificación eficaz. El oro suele estar más codiciado en épocas de celebración —basta con observar la demanda durante las temporadas de festivales y bodas en China e India— o cuando aumenta el miedo y la incertidumbre. Con frecuencia, es durante esos momentos de mayor preocupación y volatilidad cuando muchos inversores podrían valorar la posibilidad de invertir en oro.

2023-04-04 12:11:15

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