Este pasado miércoles, el precio del barril de Brent cayó cerca de un 7%, su mayor retroceso diario en los últimos dos años, después de que la Corporación Nacional del Petróleo de Libia reabriese cuatro puertos dedicados a la exportación de crudo. Esta decisión ha puesto fin a los cierres de terminales petroleras en el […]
InternacionalDirigentes Digital
| 12 jul 2018
Este pasado miércoles, el precio del barril de Brent cayó cerca de un 7%, su mayor retroceso diario en los últimos dos años, después de que la Corporación Nacional del Petróleo de Libia reabriese cuatro puertos dedicados a la exportación de crudo. Esta decisión ha puesto fin a los cierres de terminales petroleras en el país que se produjeron desde finales de junio.
Libia ha tomado la decisión de reabrir los puertos clave para comercializar su crudo tras ver reducirse su producción de petróleo a 527.000 barriles por día, que contrasta con el máximo de 1,28 millones de barriles alcanzado en febrero. La medida ha hecho además fluctuar a la baja los precios de los hidrocarburos, anunciando inestabilidad a corto plazo.
A raíz de este desplome del precio del Brent, el presidente de la OPEP, el emiratí Suhail al-Mazrouei, ha considerado este pasado miércoles que no es deseable que continúe la volatilidad en el mercado del petróleo y ha asegurado que el cártel que preside intenta propiciar un escenario de precios más estable, al tiempo que ha atribuido partes de las fluctuaciones a las tensiones comerciales con EEUU.
En declaraciones a la agencia Reuters, al-Mazrouei ha destacado que “la fluctuación no es buena y no nos gusta ver muchas fluctuaciones en los precios”, añadiendo que la OPEP y otros países productores de crudo, como Rusia, están trabajando en un plan a largo plazo que ponga en marcha planes de contingencia en caso de interrupción del suministro por cuestiones geopolíticas.
El presidente de la OPEP ha asegurado que las fluctuaciones de precios continuarán mientras no haya un plan a largo plazo para la producción. Mientras, el cártel petrolero anunció en las últimas horas que sus estados miembros han producido en junio 32,33 millones de barriles diarios de petróleo, lo que supone 173.000 barriles al día más que en mayo.
La OPEP ha atribuido este incremento a Arabia Saudí e Iraq, que elevaron su producción 405.000 y 71.500 barriles diarios de crudo, respectivamente. Mientras, Emiratos Arabes Unidos ha aumentado su rendimiento en 21.300 barriles al día, Qatar en 20.000 barriles y Argelia en 14.000 barriles, en tanto que Angola ha sido el miembro de la organización que más ha reducido su producción, con 38.000 barriles menos
La organización de países productores de crudo ha pronosticado en su informe de junio que la demanda global de petróleo sobrepasará los 100 millones de barriles diarios en 2019, un 1,45% más que en 2018. Además, ha dado por seguro que sus 15 países miembros podrán garantizar un suministro que no afecte a la estabilidad del mercado, aunque ha urgido a no perder de vista la volatilidad que procede de las tensiones políticas, comerciales y diplomáticas en torno a EEUU.