Todas las visitas y recepciones retrasadas por la pandemia empiezan a atestar la agenda oficial del Gobierno español. Libia, Argentina o Costa Rica son algunos de los contactos más recientes que han emprendido las instituciones del país, a quienes se han sumado las empresas, deseosas de exportar sus productos y servicios a otras zonas del […]
InternacionalDirigentes Digital
| 18 jun 2021
Todas las visitas y recepciones retrasadas por la pandemia empiezan a atestar la agenda oficial del Gobierno español. Libia, Argentina o Costa Rica son algunos de los contactos más recientes que han emprendido las instituciones del país, a quienes se han sumado las empresas, deseosas de exportar sus productos y servicios a otras zonas del mundo.
El último encuentro se produjo la semana pasada, cuando el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, visitó por primera vez España tras el inicio de la pandemia. Ambos países buscan una colaboración estratégica, sobre todo después de que la Unión Europea firmara un tratado comercial con el país asiático, y con más interés si cabe tras los planes de inversión que han iniciado las dos partes.
La visita de la semana pasada fructifica en dos acuerdos de colaboración que tienen las aduanas y el emprendimiento como principales objetivos. En primer lugar, el acuerdo en materia aduanera pretende mejorar el tráfico de mercancías así como combatir posibles infracciones.
En lo que corresponde al emprendimiento y a las pymes, se firmó un memorando con vistas a promover la innovación y la internacionalización de las pymes de ambos países. Por otro lado, otro de los documentos busca explorar nuevas oportunidades sobre industria 4.0, así como cooperar en energías limpias y eficiencia energética.
Este último punto es uno de los más destacados de entre la colaboración acordada por los dos países. Se ha creado un Programa Bilateral KSEI (Korea & Spain Energy Innovating Program) que concuerda con los Planes de Recuperación europeos y coreanos.
De hecho, Corea del Sur ha lanzado su propio “Korean New Deal”, que pretende inyectar hasta 140.000 millones de dólares en la economía hasta 2025. Por un lado, estas inversiones se dirigirán a acelerar la digitalización y, por otro, a mejorar la producción energética coreana y a hacerla más sostenible. En total, se espera que estos planes puedan crear hasta 2 millones de puestos de trabajo para 2025.
La intención del país asiático es abandonar su dependencia de los combustibles fósiles y promover industrias más respetuosas con el medio ambiente, según informa la Embajada coreana en España. De manera concreta, el plan incluiría desarrollar la automoción eléctrica, las redes inteligentes, la salud digital y apostar por el hidrógeno.
Por eso, ambos presidentes mostraron su sintonía durante el encuentro. Desde el punto de vista de Corea del Sur, estos acuerdos elevan las relaciones entre ambos países a una “asociación estratégica” y contribuyen a la consecución del plan de Corea para transformar su economía para 2025.
Por su parte, el presidente del Gobierno destacó las grandes oportunidades de colaboración económica, comercial y de inversión entre España y la República de Corea, “dos países con un tejido empresarial fuerte y competitivo, que hemos apostado por la economía verde y circular como ejes fundamentales de la recuperación económica y el crecimiento sostenible”.