La Unión Europea se propuso el año pasado abrir la manguera del crédito para evitar que la economía del continente acabara colapsando. Muestra de ello son el Plan Next Generation EU, así como otras medidas de crédito que se han puesto a disposición de los estados desde Bruselas, como el SURE, el seguro de crédito […]
InternacionalDirigentes Digital
| 20 ene 2021
La Unión Europea se propuso el año pasado abrir la manguera del crédito para evitar que la economía del continente acabara colapsando. Muestra de ello son el Plan Next Generation EU, así como otras medidas de crédito que se han puesto a disposición de los estados desde Bruselas, como el SURE, el seguro de crédito para ERTEs.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) también ejecuta un papel relevante en ese sentido, ya que durante el año pasado llegó a proporcionar una financiación global de 76.800 millones de euros. En otras circunstancias, el banco de la Unión Europea se habría dedicado a invertir en los pilares del mandato de Úrsula von der Leyen, tales como la sostenibilidad o la digitalización.
Aunque este año no ha sido una excepción, sí es cierto que la financiación de las pymes ha protagonizado la actividad de este banco de crédito, según explicó el vicepresidente del BEI, Mourinho Félix, durante un encuentro con la prensa. Así, de los 76.800 millones que ha financiado el BEI, 30.560 millones se han destinado a las pymes, mientras que el dinero destinado a actividades relacionadas con el medio ambiente alcanzó los 16.820 millones de euros.
De hecho, hay que aclarar que la actividad del BEI en lo que respecta a acción climática ha ido aumentando con los años. En España, el porcentaje de la acción climática ha crecido desde el 6% de 2016 hasta el 29% de 2019 y el 38% de 2020.
Así, España ha sido uno de los principales receptores de la financiación del BEI, con casi 8.500 millones de euros. En lo que respecta a las pymes españolas, Félix ha recalcado lo “particular y difícil” que fue 2020 para las empresas y “todos los que han sido afectados por la pandemia”. Para mitigar el impacto económico de la crisis, el BEI suscribió con el ICO un préstamo de 1.000 millones de euros para proporcionar liquidez a autónomos, pymes y mid-caps.
Según Félix, los esfuerzos de su entidad en otros tiempos han tenido más que ver con las prioridades estratégicas de la Unión, si bien en este momento “las líneas que estaban dedicadas a la inversión se pudieron usar para liquidez”. Eso significa que se ha flexibilizado tando el uso como el acceso a las distintas líneas de financiación que se han puesto en marcha.
En total, los proyectos que ha apoyado el BEI han tenido como objetivo a 118.500 empresas españolas que emplean a más de un millón de personas. Según los cálculos de la entidad, el importe medio de los préstamos del BEI alcanzó los 74.000 euros, lo que sumó un total de 4.195 millones de euros destinados a las pymes.
Félix cree que “la economía ha cambiado drásticamente el segundo trimestre de 2020”, lo que se ha reflejado en la actividad del BEI. “Es muy importante proveer liquidez a las empresas”, comenta el vicepresidente. En ese sentido, contestó a DIRIGENTES que esta crisis “es muy diferente a la crisis financiera”, por ello la respuesta de las instituciones europeas ha tratado de cubrir todos los sectores.