Estados Unidos ha seguido su propio rumbo en los últimos meses. Mientras que el resto del mundo ha sufrido una ralentización del crecimiento, la primera potencia mundial ha mantenido unos niveles de actividad económica diferentes, tanto en lo que se refiere a producción como a empleo. Además, la Guerra Comercial iniciada durante el pasado año […]
InternacionalDirigentes Digital
| 10 ene 2019
Estados Unidos ha seguido su propio rumbo en los últimos meses. Mientras que el resto del mundo ha sufrido una ralentización del crecimiento, la primera potencia mundial ha mantenido unos niveles de actividad económica diferentes, tanto en lo que se refiere a producción como a empleo.
Además, la Guerra Comercial iniciada durante el pasado año no parece haber hecho mella en el desempeño de la economía estadounidense, al menos por ahora. Junto a eso, hay que destacar cómo se ha favorecido del alza de los tipos de interés, en una hoja de ruta que la Reserva Federal ha ido aplicando durante todo 2018.
No obstante, en vistas de que 2019 no tiene unas perspectivas tan prósperas como el año inmediatamente anterior, la Reserva Federal (Fed) da cobijo a planteamientos que cuestionan la estrategia actual. Y es que, de confirmarse las expectativas, continuar con las subidas de los tipos como hasta ahora puede convertirse en un freno para la actividad económica.
Así lo reflejan las actas de la última reunión de la Fed, la que se celebró el 18 y 19 de diciembre. No obstante, según esas mismas actas, distintos miembros de la Fed mostraron su preocupación por los posibles “malentendidos” que puede provocar un cambio de rumbo en la política monetaria.
En esa reunión, la Fed estimaba que la economía estadounidense no crecerá tanto como en los años precedentes. El año que viene el crecimiento alcanzará el 2,3% según la Fed, una cifra dos décimas inferior a la prevista por esta organización en septiembre. En cuanto a 2020 y 2021, las expectativas se mantienen, con tasa del 2% y del 1,8% respectivamente, que denotan una ralentización de la producción estadounidense.
Eso provocó que en el mismo momento de la última subida de tipos, algunos analistas interpretaran que la Fed comenzaba a plantearse otras salidas: “La Fed continúa pensando que más subidas son necesarias, si bien cambió algunas palabras (“expects” por “judges”) en relación con la conveniencia de aumentar tipos; empiezan a haber serias dudas entre los oficiales de la Fed. Eso ya es algo.”, explicaba en su momento Alex Fusté, economista jefe de Andbank.