Nacido en Israel y nacionalizado brasileño, el economista Ilan Goldfajn asumirá, el 19 de diciembre, la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) tras ser electo en Washington por una asamblea con representantes de los 48 países miembros, incluidos EEUU y Canadá. Gestión pública y privada Con una amplia trayectoria internacional y también en Brasil […]
InternacionalDirigentes Digital
| 01 dic 2022
Nacido en Israel y nacionalizado brasileño, el economista Ilan Goldfajn asumirá, el 19 de diciembre, la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) tras ser electo en Washington por una asamblea con representantes de los 48 países miembros, incluidos EEUU y Canadá.
Gestión pública y privada Con una amplia trayectoria internacional y también en Brasil -donde dirigió la estrategia del banco Itaú (el de mayor capital privado de Latam), además de presidir el Banco Central hasta 2019- Goldfajn sucede a Mario Claver-Carone, que representaba allí un freno norteamericano al avance de China en la región.
Goldfajn, un economista de perfil técnico designado por el presidente Jair Bolsonaro, venció la elección con el voto de la mayoría de los ministros de finanzas, presidentes de bancos centrales y otras autoridades económicas de la región. En su país, enfrenta oposición de sectores alineados con el nuevo presidente, Lula da Silva, que le consideran “demasiado técnico”.
Entre los antecedentes de Goldfajn, de 56 años, su paso por la función pública destaca por el control ejercido en la inflación cuando presidente del BC y el cumplimiento de una rígida política de gastos públicos, además de la reducción de los tipos de interés de 14,25 % al 6,5 %, una de las mayores de la historia de Brasil.
Lo social y las cuentas Sin embargo, cuando -antes de ser postulado por Bolsonaro a presidir el BID- Goldfjan dirigía el Departamento del Hemisferio Occidental del FMI (Ver Dirigentes), el economista había hecho foco en cuestiones sociales al analizar qué debían hacer las instituciones frente los efectos de la pandemia y de la guerra.
“Los disturbios sociales (previos a la llegada de la pandemia) siguen representando un grave riesgo y es necesario abordar el tema de la desigualdad”, dijo en febrero de 2022. “Los gobiernos deberían proporcionar apoyo a los hogares vulnerables y dejar que los precios internos se ajusten con los precios internacionales”, recomendó en otro análisis firmado en mayo.
Tales declaraciones fortalecen la visión de que Goldfajn entendía que su misión allí era la de “asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas, incrementar el crecimiento potencial y hacerlo de manera de corregir las inequidades sociales”.
Gestión anterior y desafíos Las medidas más destacadas de su antecesor, orientadas a convertir al BID en “una entidad más relevante financieramente” (Ver Dirigentes), fueron la inversión de 1.000 millones de euros para un plan de “desarrollo y seguridad” en Colombia, 820 millones para vacunas contra el covid y una estrategia alineada con la geopolítica de Joseph Biden.
Hasta 2027, dentro del BID Goldfajn presidirá también la división Invest (con 15.000 millones de euros en gestión de activos y 375 clientes en 25 países) y dirigirá el Lab (que ha aprobado, en 30 años, 2000 millones de euros en proyectos de innovación para la inclusión social). Todo ello en un escenario en el que pandemia y guerra vienen aumentando tanto la inflación como la pobreza.