La evolución de la industria multimedia ha pegado un importante impulso a lo largo de los últimos meses. La llegada de la pandemia y el confinamiento más restrictivo vivido la pasada primavera, generaron el surgimiento de nuevos hábitos relacionados con el entretenimiento. En este tiempo, el consumo de podcast y audiolibros se ha disparado en todo el mundo, de igual manera que en España, donde los usuarios se suman a esta nueva forma de ocio por una cuestión de comodidad.

La fiebre del podcast es imparable y crece mes a mes. Cada día se publican cerca de 20.000 nuevos, generando unos ingresos de 1,300 millones de dólares, una cantidad que se estima que crecerá hasta los 8,000 millones en 2030, según datos facilitados por Podimo, una plataforma de podcasting especializada en la generación de recomendaciones personales para los usuarios. Ante estos datos, desde la organización revelan su sorpresa ante el alto compromiso de los oyentes.

Por su parte, los audiolibros también están experimentando un importante crecimiento y se calcula que cuadriplicarán sus beneficios de aquí a 2030, al pasar de los 5,000 millones de dólares actuales hasta los 20,000 millones.  

Los españoles destacan su comodidad

El oyente español cada vez hace más uso de este modo de ocio. Su boom llegó de la mano de la COVID-19 y la mayoría de personas resaltan la comodidad que supone poder escuchar el podcast cuando y donde quieran. Esta es la respuesta otorgada por el 30% de los encuestados, según datos incluidos en informes de PWC y Prodigioso Volcán, facilitados por Podimo. En segundo lugar, con un 27%, los individuos lo consideran una manera de entretenerse y relajarse, seguido de aquellos que quieren aprender cosas nuevas (23%) y los que dicen utilizarlo con la intención de informarse (20%). 

El perfil del consumidor de podcast en nuestro país se caracterizada por ser una persona de entre 25 y 45 años que reside en una de las grandes ciudades y consume un total de 15 horas de audio al mes. Así las cosas, la mayoría de personas los escuchan dos veces al día en sesiones de entre 20 y 30 minutos. El idioma predominante entre los usuarios continúa siendo el castellano. En este sentido, la gran mayoría (85%) elige esta lengua, frente al 15% que lo hace en otras diferentes.  

Entre los cambios provocados en los oyentes como consecuencia de la pandemia, también sobresalen las horas del día en las que se lleva a cabo el consumo. Así, en la actualidad, se hace uso de la mayor parte de los contenidos principalmente durante la jornada laboral y, a partir de las 20 horas, se reduce el número de estas escuchas, dando paso a otras fórmulas como pueden ser los medios audiovisuales. 

En cuanto a las temáticas elegidas, el entretenimiento sigue siendo el componente por el que se decantan los españoles. El suspense se cuela en segundo lugar, seguido del desarrollo personal, la divulgación y la temática romántica que cae hasta la última posición.